Alcaldía de Cali y dueños de moteles pactan la reapertura del sector
“Cali es una ciudad del amor y ante el amor nos rendimos. Lo más importante, nos rendimos con bioseguridad, por eso se abren los moteles”, dijo el alcalde Jorge Iván Ospina.
El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, confirmó la reapertura, después de más de cinco meses, de los más de 300 moteles que hay en la capital del Valle del Cauca.
En un acto público llevado a cabo en la tarde del miércoles, tanto la Alcaldía como los dueños de los establecimientos se comprometieron a acatar las medidas de bioseguridad necesarias para no volver a estos lugares un foco de contagio.
“Cali es una ciudad del amor, ante el amor nos rendimos, pero lo más importante es que nos rendimos con bioseguridad. Las personas deben entender que es importante cumplir con todas las medidas dispuestas por el Ministerio de Salud”, aseguró Ospina.
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En materia laboral, según la Secretaría de Desarrollo Económico de la ciudad, la reapertura de este sector significará el regreso al trabajo de más de 6.000 personas.
“Si bien es cierto que no es un sector muy grande, es importante porque genera muchos empleos para las madres cabeza de hogar y mujeres adultas por encima de los 50 años”, agregó el secretario, Argemiro Cortés.
Según voceros del sector de los moteles, llevan más de dos meses negociando la reapertura de sus negocios. “En nuestros establecimientos estamos cumpliendo con todo para brindarles un espacio seguro”, afirmó Nelson Lourido, presidente de la Asociación de Apartahoteles, Moteles, Amoblados y Residencias del Valle del Cauca.
Entre las medidas que deberán cumplir los moteles en Cali estarán: efectuar campañas pedagógicas entre sus empleados para advertir sobre el riesgo de contraer el virus, realizar monitoreos constantes para detectar casos sospechosos de COVID-19, poner a disposición elementos de bioseguridad, tener una ocupación máxima del 50%, y no habilitar las zonas húmedas comunes.
El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, confirmó la reapertura, después de más de cinco meses, de los más de 300 moteles que hay en la capital del Valle del Cauca.
En un acto público llevado a cabo en la tarde del miércoles, tanto la Alcaldía como los dueños de los establecimientos se comprometieron a acatar las medidas de bioseguridad necesarias para no volver a estos lugares un foco de contagio.
“Cali es una ciudad del amor, ante el amor nos rendimos, pero lo más importante es que nos rendimos con bioseguridad. Las personas deben entender que es importante cumplir con todas las medidas dispuestas por el Ministerio de Salud”, aseguró Ospina.
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En materia laboral, según la Secretaría de Desarrollo Económico de la ciudad, la reapertura de este sector significará el regreso al trabajo de más de 6.000 personas.
“Si bien es cierto que no es un sector muy grande, es importante porque genera muchos empleos para las madres cabeza de hogar y mujeres adultas por encima de los 50 años”, agregó el secretario, Argemiro Cortés.
Según voceros del sector de los moteles, llevan más de dos meses negociando la reapertura de sus negocios. “En nuestros establecimientos estamos cumpliendo con todo para brindarles un espacio seguro”, afirmó Nelson Lourido, presidente de la Asociación de Apartahoteles, Moteles, Amoblados y Residencias del Valle del Cauca.
Entre las medidas que deberán cumplir los moteles en Cali estarán: efectuar campañas pedagógicas entre sus empleados para advertir sobre el riesgo de contraer el virus, realizar monitoreos constantes para detectar casos sospechosos de COVID-19, poner a disposición elementos de bioseguridad, tener una ocupación máxima del 50%, y no habilitar las zonas húmedas comunes.