La Feria de Cali es uno de los eventos de fin de año más concurridos del país. Año tras año, colombianos y extranjeros se dan citan los últimos días de diciembre para pasar unas cortas vacaciones en la “sucursal del cielo”, rodeados de salsa, desfiles y una buena dosis de alegría.
Para evitar incidentes y malos ratos entre los asistentes, este año el Plan de Seguridad estará integrado por unidades de la Policía de Infancia y Adolescencia, Tránsito, Bachilleres, Guías Caninos, Carabineros, Unipol, Turismo, Sijín y Sipol, además de los uniformados que forman parte del Modelo Nacional de Vigilancia Comunitaria por Cuadrantes, quienes continuarán garantizando la tranquilidad en cada una de sus jurisdicciones.
La Fuerza Pública se desplegará por los sitios estratégicos en donde se desarrollarán la mayoría de actividades como el Salsódromo, las vías por las que pasa el desfile de autos clásicos y antiguos, en las que se realiza Cali Viejo, la Calle de la Feria, el escenario del Superconcierto, de las Ferias Rurales y Comuneras, del Encuentro de Melómanos y Coleccionistas, y las tascas, entre otras.
La recomendación para los habitantes de la ciudad es evitar que las viviendas permanezcan solas mucho tiempo, cerrar puertas y ventanas, no permitir la entrada de personas extrañas, no dejar a los niños solos en la calle, centros comerciales o en el carro ni manipular pólvora.
Quienes vayan a retirar sumas significativas de dinero del banco deben solicitar acompañamiento de la Policía y para curarse en salud sólo comprar licor en almacenes de cadena o lugares autorizados.
De esta manera se espera que el plan de seguridad, que este año lleva por nombre 'Comprometidos de corazón', haga eco entre locales y turistas e impacte positivamente las cifras durante los cinco días de feria. Para garantizar unos buenos resultados el compromiso ciudadano, a través de la tolerancia y el respeto, es clave.