La noticia fue dada por el Hospital Universitario del Valle en la tarde del lunes; a pesar de ello, la directora del centro médico, Maria Lucero Urriago, indicó que atendieron al menor de acuerdo con la sintomatología que presentó el menor y por los resultados de la necropsia aplicada a los menores muertos en Santander de Quilichao al ser contagiados por un gato.
La directora del hospital explica que esta situación es común porque la única manera de comprobar si el virus de la rabia está en el organismo es mediante una necropsia. "Para nosotros, Sebastián sí tenía el virus, pero no podemos asegurarlo con certeza", indicó Urriago.
"No sabemos si tenía o no rabia. Nos quedaremos con la duda, pero también con la satisfacción de que hicimos lo que teníamos que hacer" para salvar la vida del menor, dice la epidemióloga Yolanda Caicedo.
En los primeros días en los que en niño fue internado en el hospital se temió inclusive por su muerte y su recuperación. Luego del tratamiento fue anunciado como uno de los pocos casos en el mundo en los que un ser humano se salva por la mordedura de un animal con rabia.