ExpoCundinamarca vuelve para fortalecer la recuperación de la economía

El impacto económico del covid-19 ha sido significativo para artesanos como Ronni Martínez, quien desde hace años se dedica a elaborar piezas decorativas en su empresa Artensal. Ante la incertidumbre, él tuvo que cerrar su local apenas empezó la pandemia, migrar la producción a la casa y probar sus habilidades con las ventas en línea. Comenta que de a poco se ha ido recuperando, pero que las cuentas todavía no le dan como cuando comenzó en 2020.

Como otros empresarios, sus esperanzas están depositadas en las fiestas decembrinas. Y es justo en el marco de esta celebración que se anuncia, luego de tres años, el regreso de ExpoCundinamarca, una feria turística, empresarial, gastronómica y cultural que congregará lo mejor de los 116 municipios del departamento.

Para la secretaria de Asuntos Internacionales, Marcela Machado, ExpoCundinamarca es el escenario propicio para reactivar la economía del departamento, pues es una plataforma en la que empresarios y emprendedores podrán hacer ventas sin intermediarios, llegar con sus marcas a más público y establecer negocios de largo plazo, en caso de llegar a convertirse en proveedores de quienes se interesan por sus productos y servicios.

La misma mirada tiene el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, quien dijo que “como departamento hemos vivido este último año momentos difíciles, de estar alejados y afrontando dificultades económicas. Por eso traemos de nuevo ExpoCundinamarca, como ese punto de encuentro de nuestras familias, productos e identidad, y de paso apoyamos la reactivación”.

Este año la feria se realizará del 2 al 5 de diciembre en el Campo de Golf Briceño 18 (Sopó), a unos 40 minutos de Bogotá. Expositores y asistentes tendrán un espacio de 25.000 metros cuadrados al aire libre, donde además habrá actividades para todos, como una Cundi Granja, para que los niños monten en poni y alimenten a los conejos. Esto se complementará con una variada parrilla cultural, juegos tradicionales y espacios de karaoke, que organizará la Empresa de Licores de Cundinamarca para los más grandes.

Luz Marina Basto también es productora del departamento, con su empresa Liberarte Café y Panela, y será una de las participantes del certamen. Con su experiencia en las dos ediciones pasadas de la feria, ella explica que “estos espacios son uno de los medios más importantes para los productores de la región”. Y por una razón concreta: “Es una gran ventana en este momento para nosotros, pues nos hace visibles y nos permite comercializar directamente nuestros productos. En temporada de ferias, nuestros ingresos pueden aumentar considerablemente, ya que nuestro producto de 70 años de tradición es muy acogido”.

Tanto Martínez, con sus cafés especiales y panela orgánica, como Basto, con sus lámparas, pantallas y esculturas en sal, celebran que su participación en la feria sea casi que a costo cero, ya que la Gobernación les provee el espacio y el mobiliario de sus estands.

Su participación se limita a escoger lo mejor de sus productos para llevarlos a la exposición y preparar una decoración que represente el municipio de donde provienen. La empresaria de Liberarte, por ejemplo, tiene claro que llevará artesanías y flores autóctonas para hacer de su espacio algo muy bonito, según afirma.

Como pasa con la economía, ExpoCundinamarca también comienza a reactivarse, pues aunque en las dos ediciones pasadas congregó a 115.000 y 75.000 personas, respectivamente, para este año prevé una participación de unas 5.000 en simultáneo y con los mejores pronósticos de asistencia. En las expectativas que maneja la Secretaría de Asuntos Internacionales también está la consolidación de ventas por más de $400 millones, para los participantes de los 116 municipios, mientras que en el apartado gastronómico, “Sabores de Cundinamarca”, se espera que la cifra supere los $500 millones.

Fuera de la gastronomía y las artesanías, el turismo tendrá un papel protagónico en esta nueva edición, con oferta de paquetes para recorrer el departamento y vacacionar. Hay que tener en cuenta que este es uno de los renglones de la economía más golpeados por la pandemia. No obstante, algunos lo han visto como una oportunidad para sacar a relucir ese potencial turístico que tiene Cundinamarca.

En suma, lo que busca la Gobernación es que este campo de golf en Sopó se convierta, por cuatro días, en el pueblo más representativo de Cundinamarca (de hecho, la ambientación será como la de uno de sus pueblos tradicionales). Una oportunidad perfecta para pasar tiempo en familia y, lo más importante, apoyar la reactivación de estas empresas que demuestran que la pandemia no pudo ganarles la batalla.

El impacto económico del covid-19 ha sido significativo para artesanos como Ronni Martínez, quien desde hace años se dedica a elaborar piezas decorativas en su empresa Artensal. Ante la incertidumbre, él tuvo que cerrar su local apenas empezó la pandemia, migrar la producción a la casa y probar sus habilidades con las ventas en línea. Comenta que de a poco se ha ido recuperando, pero que las cuentas todavía no le dan como cuando comenzó en 2020.

Como otros empresarios, sus esperanzas están depositadas en las fiestas decembrinas. Y es justo en el marco de esta celebración que se anuncia, luego de tres años, el regreso de ExpoCundinamarca, una feria turística, empresarial, gastronómica y cultural que congregará lo mejor de los 116 municipios del departamento.

Para la secretaria de Asuntos Internacionales, Marcela Machado, ExpoCundinamarca es el escenario propicio para reactivar la economía del departamento, pues es una plataforma en la que empresarios y emprendedores podrán hacer ventas sin intermediarios, llegar con sus marcas a más público y establecer negocios de largo plazo, en caso de llegar a convertirse en proveedores de quienes se interesan por sus productos y servicios.

La misma mirada tiene el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, quien dijo que “como departamento hemos vivido este último año momentos difíciles, de estar alejados y afrontando dificultades económicas. Por eso traemos de nuevo ExpoCundinamarca, como ese punto de encuentro de nuestras familias, productos e identidad, y de paso apoyamos la reactivación”.

Este año la feria se realizará del 2 al 5 de diciembre en el Campo de Golf Briceño 18 (Sopó), a unos 40 minutos de Bogotá. Expositores y asistentes tendrán un espacio de 25.000 metros cuadrados al aire libre, donde además habrá actividades para todos, como una Cundi Granja, para que los niños monten en poni y alimenten a los conejos. Esto se complementará con una variada parrilla cultural, juegos tradicionales y espacios de karaoke, que organizará la Empresa de Licores de Cundinamarca para los más grandes.

Luz Marina Basto también es productora del departamento, con su empresa Liberarte Café y Panela, y será una de las participantes del certamen. Con su experiencia en las dos ediciones pasadas de la feria, ella explica que “estos espacios son uno de los medios más importantes para los productores de la región”. Y por una razón concreta: “Es una gran ventana en este momento para nosotros, pues nos hace visibles y nos permite comercializar directamente nuestros productos. En temporada de ferias, nuestros ingresos pueden aumentar considerablemente, ya que nuestro producto de 70 años de tradición es muy acogido”.

Tanto Martínez, con sus cafés especiales y panela orgánica, como Basto, con sus lámparas, pantallas y esculturas en sal, celebran que su participación en la feria sea casi que a costo cero, ya que la Gobernación les provee el espacio y el mobiliario de sus estands.

Su participación se limita a escoger lo mejor de sus productos para llevarlos a la exposición y preparar una decoración que represente el municipio de donde provienen. La empresaria de Liberarte, por ejemplo, tiene claro que llevará artesanías y flores autóctonas para hacer de su espacio algo muy bonito, según afirma.

Como pasa con la economía, ExpoCundinamarca también comienza a reactivarse, pues aunque en las dos ediciones pasadas congregó a 115.000 y 75.000 personas, respectivamente, para este año prevé una participación de unas 5.000 en simultáneo y con los mejores pronósticos de asistencia. En las expectativas que maneja la Secretaría de Asuntos Internacionales también está la consolidación de ventas por más de $400 millones, para los participantes de los 116 municipios, mientras que en el apartado gastronómico, “Sabores de Cundinamarca”, se espera que la cifra supere los $500 millones.

Fuera de la gastronomía y las artesanías, el turismo tendrá un papel protagónico en esta nueva edición, con oferta de paquetes para recorrer el departamento y vacacionar. Hay que tener en cuenta que este es uno de los renglones de la economía más golpeados por la pandemia. No obstante, algunos lo han visto como una oportunidad para sacar a relucir ese potencial turístico que tiene Cundinamarca.

En suma, lo que busca la Gobernación es que este campo de golf en Sopó se convierta, por cuatro días, en el pueblo más representativo de Cundinamarca (de hecho, la ambientación será como la de uno de sus pueblos tradicionales). Una oportunidad perfecta para pasar tiempo en familia y, lo más importante, apoyar la reactivación de estas empresas que demuestran que la pandemia no pudo ganarles la batalla.