La crisis de migrantes en el Darién no para, aumenta
En Necoclí (Colombia) ya se acostumbraron a que a diario cientos de personas acampen en sus playas a la espera de coger las lanchas que los llevan a la frontera de Panamá en una travesía migratoria hacia EE.UU. que crece cada día y amenaza con “explotar”. Es un flujo constante, itinerante, de personas de todo el mundo, familias enteras que caminan juntas y que solo comparten las ganas de conseguir un futuro mejor a cualquier costo, incluso el de pasar por uno de los pasos fronterizos más peligrosos del mundo.