El acuerdo sobre justicia transicional sellado por el Gobierno y las Farc, que según ambas partes anuncia un cercano fin para el prolongado conflicto interno, generó escepticismo por parte de Human Rights Watch (HRW).
De acuerdo con el director de HRW para América, José Miguel Vivanco, el acuerdo conlleva impunidad para los autores de delitos graves, por lo que la Corte Penal Internacional (CPI) podría no aceptarlo.
El acuerdo "permitiría que los máximos responsables de los peores abusos puedan eximirse de pasar siquiera un solo día en prisión", apuntó Vivanco, quien siempre ha expresado su desacuerdo con algunos aspectos de este proceso de paz.
Precisamente, la fiscal general de la CPI, Fatou Bensouda, afirmó recientemente que revisará en detalle y analizará cuidadosamente las disposiciones acordadas entre el Gobierno colombiano y las Farc, aunque las consideró un "paso significativo hacia el fin del conflicto armado".
"Noto con optimismo que el acuerdo excluye la concesión de amnistías por crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad, y que está diseñado, entre otras cosas, para poner fin a la impunidad por los crímenes más graves", señaló.
El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, ya había calificado el anuncio este miércoles como "un avance histórico hacia un acuerdo final de paz para acabar con más de cincuenta años de conflicto armado" y consideró que "la paz está ahora más cerca que nunca para el pueblo colombiano y millones de víctimas del conflicto".