El exfuncionario dimitió hace cerca de un mes a su cargo por discrepancias con su jefe, el ministro Carlos Rodado, sobre el cierre de las minas. Su pronunciamiento tuvo lugar luego de que se registrara otra tragedia minera, esta vez en Sutatausa (Cundinamarca), que dejó cinco personas muertas.
La alcaldesa de Sutatausa, María Antonia Villamil Chocontá, explicó que los cinco trabajadores que murieron quedaron atrapados en La Escondida, la mina de la emergencia, situada en Peñas del Boquerón.
El accidente fue ocasionado por una explosión de gas metano, que fue la misma causa de la tragedia que la semana pasada dejó 21 muertos y seis heridos en un yacimiento del mineral en Sardinata (Norte de Santander).