Comercio local de San Andrés está en crisis

El llamado "turismo chancleta", las irregularidades en los manejos de la salud y el incremento de la delincuencia, estarían generando pérdidas a comerciantes.

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Efraín Dawkins Sanmiguel / @Efrain_Dawkins
08 de mayo de 2018 - 02:04 a. m.
Comercio local de San Andrés está en crisis
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Para el mes de marzo y en lo que va corrido de abril, los propietarios de negocios en la isla de San Andrés han sufrido considerables pérdidas. Indican que en la Semana Santa de este año hubo un descenso del 50% en las ganancias con respecto a la de 2016.

Un comerciante extranjero, que prefiere omitir su nombre, en su experiencia como administrador de tres negocios familiares en donde un 95% de sus productos son americanos, señala que desde los  meses de enero y febrero el comercio local está atravesando por uno de sus peores momentos de los últimos años.

Entre los mercaderes mayormente afectados se sitúan quienes ofrecen tours por los cayos, arrendatarios de vehículos acuáticos, motocicletas y carritos de golf; y los almacenes de ropa, calzado y accesorios ubicados en la zona de la peatonal.

Para Daniel Biscaino, coordinador de la Oficina de Control de Circulación y Residencia (Occre) sede aeropuerto, la calidad del turismo que está ingresando es la razón por la cual el comercio ha decaído. Las aerolíneas que ofrecen tiquetes a bajo costo, estarían  incrementando el denominado “Turismo chancleta”, que llega al departamento solo con lo justo y sin intenciones de realizar compras. “Un tiquete de Cartagena a San Andrés se consigue desde 60 mil pesos y se han presentado casos con  turistas que hasta el botellón de agua traen para evitar gastar” señala Biscaino.

Algunos taxistas manifiestan que existe cierto tipo de visitantes que prefiere caminar del aeropuerto al hotel, para ahorrarse el pago de la carrera. “San Andrés es un destino turístico y al parecer todos no tienen claro que aquí los precios y la economía es diferente a sus ciudades de procedencia”, señala uno de los conductores.

Otro elemento clave que estaría influyendo sería la venta de paquetes todo incluido ofrecido por las agencias de viaje que, al prometer transporte, comida y estadía, disponen mayor facilidad y confort al turista. Para Carlos Gómez, propietario de vehículos acuáticos destinados al turismo, en los visitantes extranjeros se encontraba anteriormente gran parte del éxito, pero desde que la mayoría del turismo proviene del país, la economía local va en declive.

Julio García Jaramillo, hotelero hace más de  20 años y uno de los empresarios más exitosos de la isla, asegura que la calidad del turista que visita al departamento en la actualidad, sigue siendo la misma  desde el inicio de su negocio en San Andrés. Él denominó la crisis que denuncian los comerciantes, como “la ola en bajada” que consiste en un descenso en la hotelería y el comercio local que termina afectando a todos por igual. Por ejemplo, en sus hoteles la estadía por día que incluye alimentación y algunos tours, cuesta alrededor de 150.000 pesos, mientras que en una posada que incluye solo el desayuno, cuesta 80.000 pesos. “A veces toca bajar el precio hasta 120.000 pesos cuando la temporada no está en su mejor momento”, asegura el hotelero que tiene a su cargo una nómina de 120 empleados. La baja de precios en la hotelería afectaría a microempresarios que se dedican al alquiler de posadas nativas, que en muchos casos terminan embargadas por los bancos a quienes le solicitaron préstamos para su creación.

“San Andrés está mal administrada y el turismo que se ofrece al visitante debe mejorar en cuanto a calidad y  servicio al cliente”, expone un turista que lleva más de diez años visitando al archipiélago y que afirma que el deterioro de las calles, establecimientos y la delincuencia que se apodera cada día de la isla, no justifica que cada año se incremente el costo de la tarjeta de turismo.

Según la Secretaría de Turismo Departamental y la OCCRE, 998.763 personas ingresaron al archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina el año pasado, cifra que supera por 61.417 a la de 2016. Para finales de 2017, el departamento recaudó cerca de 105 mil millones de pesos solamente con el impuesto de 105 mil pesos que paga cada visitante.

El acrecentamiento de la delincuencia y la presente ola de atracos a turistas, agregando el estado de emergencia en que se encuentra el Hospital Clarence Lynd Newball, estarían proyectando una mala imagen que podría llevar a San Andrés a estar en la lista negra de destinos turísticos. No obstante, de acuerdo a un informe de la Oficina de Sistemas de la Gobernación Departamental, se presentó un aumento del 3,68% en lo que va corrido del 2018, en contraste con la suma de turistas que arribaron en los cuatro primeros meses del año pasado. De acuerdo con la información del coordinador de la OCCRE y a los balances expuestos, se logró evidenciar que la crisis comercial no ha sido por consecuencia de un decrecimiento del turismo.

Se espera que para lo que resta del mes de 2018, el panorama de la economía local muestre otro semblante. Los comerciantes piden mayor compromiso entre los sectores que hacen parte de la industria turística, alegando que el individualismo está creando una brecha monetaria que tiene repercusión en todos.

Por Efraín Dawkins Sanmiguel / @Efrain_Dawkins

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