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Daniel Gil Wagner, es hoy por hoy, el más reconocido líder de los taxistas en Santa Marta. Todos los días a partir de las 5:00 a.m. manda el primer mensaje en los seis grupos de WhatsApp que concentran a más de 1.200 taxistas en la ciudad.
“Señores taxistas muy buenos días, Dios nos bendiga en la tarea de hoy, demos ejemplo de atención, honradez y servicio a nuestros pasajeros. Somos la cara amable de Santa Marta, luchemos unidos por una buena imagen y no nos dejemos sorprender de la delincuencia, cuidemos nuestra vida y nuestro patrimonio”, se le escucha decir con su voz fuerte y segura.
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El pasado 5 de mayo, se anunciaba el arribo a la ciudad del entonces candidato presidencial del Centro Democrático Iván Duque. Estaría en el barrio Pescaito para hacer su cierre de campaña en Santa Marta. Gil, que mostraba su simpatía por las propuestas del hoy Presidente con publicidad en el carro, se ofreció a llevarlo al sitio de concentración. Su ofrecimiento fue tomado.
“Siete cuadras antes de ingresar al barrio le pedí al senador Honorio Henríquez, que le ofreciera al doctor Duque que se dejara llevar por mi hasta la tarima y así fue”, contó.
Según relata Daniel Gil, aprovechó el momento con el candidato y le dijo que el gremio necesitaba de políticas claras para prestar un mejor servicio en una ciudad turística como Santa Marta a lo que Duque respondió: “trabajaré por el bien de su gremio Daniel, la ilegalidad en el transporte debe acabarse”
A Gil le llegó la invitación para la posesión por correo certificado el 25 de julio. Él pagó sus pasajes y su permanencia en Bogotá.
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“En mi diálogo con el presidente le conté que soy de Quimbaya (Quindío), llegue a Santa Marta en abril del 2006, hace ya 12 años y que el taxi lo compre en el 2007, que mi familia fue víctima de la violencia y nos tocó irnos para Cali, que vivimos en Caquetá y allá nos tocó mal vender una finca, hasta que llegamos a este paraíso llamado Santa Marta, en donde me casé con una samaria y tengo dos hijos, uno de 10 y otro de 8 años”.
Daniel Gil, quien asegura representar a por lo menos tres mil taxistas en Santa Marta, está estrenando taxímetro en su vehículo, sistema que comenzó a operar en la ciudad desde el pasado lunes 6 de agosto, aún permanece en Bogotá en donde ha sido invitado a participar en la primera reunión que desarrolla la ministra de Transporte, Ángela María Orozco.
Regresará mañana jueves a Santa Marta a retomar el volante para llevar “la papita” a la casa con el orgullo de haber participado en la ceremonia de la posesión desde una posición privilegiada, sino también de ser, quizás, el propietario del último taxi que tome Iván Duque por los próximos cuatro años.