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Un menor colombiano de 16 años fue detectado intentando ingresar sin compañía por la ruta Panamá-Darién, según informó Migración Colombia. El joven fue interceptado en la zona fronteriza y, debido a su condición de menor de edad, fue trasladado a la Comisaría de Familia de Juradó, en Chocó, para garantizar la protección de sus derechos.
Este caso evidencia la persistencia del fenómeno de la migración inversa en la región, donde municipios de Antioquia y Chocó reciben a un número creciente de migrantes que no lograron llegar a su destino final en el norte del continente.
El procurador delegado para la Defensa de los Derechos Humanos, Néstor Osuna, indicó que muchos migrantes, víctimas de grupos ilegales, se ven obligados a regresar por estructuras criminales que controlan estas rutas.
“Muchas veces víctimas de grupos ilegales, intentando migrar hacia el norte del continente, se ven obligadas a retornar y vuelven a llegar al Darién. Normalmente, llegan hasta Puerto Obaldía, en Panamá, y de allí en lanchas que son manejadas por grupos ilegales y por estructuras criminales, los traen hacia Acandí, Capurganá y otros lugares”, indicó Osuna.
Según datos de Naciones Unidas y la Defensoría del Pueblo de Colombia, aunque el número de migrantes que cruzan el Tapón del Darién ha disminuido considerablemente en 2025, con una caída del 98% respecto al año anterior, persiste la presencia de menores de edad, algunos de ellos no acompañados o separados de sus familiares durante la travesía.
La Defensoría del Pueblo ha reportado que entre 20 y 40 personas retornan diariamente a estos territorios producto de esta dinámica, y UNICEF ha registrado que entre ocho y diez menores de edad ingresan por esta ruta.