Los caminos por los que transitan los indígenas de la comunidad awá, en el suroccidente del país, han sido convertidos por grupos armados en tenobrosos pasos obligados que hoy suman a la lista una nueva víctima de una mina antipersona: a Jonathan Estiven Pascal Taicus, un niño de 12 años, que se encuentra en grave estado de salud en un Hospital de Pasto.
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De acuerdo con lo denunciado por la Unidad Indígena del pueblo Awá (Unipa) el hecho se registró el lunes 25 de diciembre de 2023, cuando el menor de edad transitaba en compañía de sus padres cerca del río Pianulpi, en el corregimiento de La Guayacana, en Tumaco, Nariño.
En un momento, el niño buscó donde hacer sus necesidades fisiológicas y terminó activando la mina cuando intenta regresar a donde estaban sus padres, que hacen parte de la comunidad Chachajo, del resguardo indígena awá del Gran Rosario.
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“Causa conmoción que en los albores de un nuevo año, un tiempo habitualmente lleno de celebraciones y esperanza, el niño Jonathan enfrentó una tragedia que ensombreció esta época de festividad para toda la comunidad”, resaltó Unipa.
El niño de 12 años, debido a la gravedad de las heridas, tuvo que ser trasladado al Hospital Infantil de Pasto, donde los médicos intentan evitar la posibilidad de amputarle el pie izquierdo, tras dos cirugías. Sumado a esto, la madre permanece junto a él, pese a, según Unipa, que no cuenta con los medios para mantenerse allí, ni para sostener a sus otros hijos que permanecen en Tumaco.
Ante esta situación, la comunidad awá ha exigido al Gobierno Nacional a hacer una intervención urgente y apoyar a la familia, así como piden que se realicen actividades de prevención y un proceso de desminado en la zona, dada la cantidad de casos y el riesgo que enfrenta los indígenas, cuyo etnocidio ha sido reconocido por la Corte IDH, así como en varias sentencias en el país.