
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Al menos 25 comunidades étnicas, seis de ellas indígenas, del Medio y Alto Tamaná, compuesta por cerca de 4 mil personas (900 familias), se confinaron en sus viviendas; atemorizadas por las amenazas realizadas por integrantes del frente guerrillero Ernesto Che Guevara del Eln, que prohibieron nuevamente la movilidad en zona rural de Nóvita, informó la Defensoría del Pueblo en la noche de este martes.
(Los invitamos a leer: “La reconciliación es difícil sin voluntad política”: Oliver Dalichau)
Según las restricciones anunciadas por el grupo guerrillero, que iniciaron este lunes 25 de abril desde las 6 de la tarde, se prohíbe la navegación por el rio Tamaná.
Una situación similar se presentó del 15 al 29 de marzo pasado cuando las comunidades estuvieron confinadas en ese mismo territorio por amenazas de ese grupo al margen de la Ley.
Desde la Regional Chocó, la Defensoría del Pueblo ofició a todas las autoridades para que se atienda la nueva emergencia humanitaria, para mitigar los efectos de este nuevo confinamiento y para que se brinde la asistencia de urgencia a la comunidad afectada, según informó ese organismo a través de un comunicado.
A través de la Alerta Temprana 027 de agosto de 2021, la Defensoría del Pueblo advirtió a las autoridades competentes sobre los riesgos por la presencia y disputa armada entre la guerrilla del Eln y las Agc o Clan del Golfo por el control territorial, imponiendo pautas de comportamiento a las comunidades.
La Alerta daba cuenta de que se impedía el ingreso a las áreas donde se realizan las prácticas tradicionales de pesca, caza, agricultura y estaba prohibido el tránsito por caminos y la navegación de embarcaciones desde la cabecera municipal de Nóvita hasta la parte media y alta del río Tamaná, instalando artefactos explosivos, realizando señalamientos y amenazas, impidiendo el acceso a la zona.
La Defensoría del Pueblo instó a a guerrilla del Eln y al Clan del Golfo a respetar los derechos de las comunidades en el territorio para que permitan el libre tránsito de la población civil y cesar sus acciones contra la comunidad de Nóvita, además a respetar los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario.