El cuerpo de Flor Marina Torres Vásquez, concejal del municipio de Venecia (Antioquia), fue encontrado este jueves en el sector de La Balastrera, municipio de Mesetas, Meta, tras permanecer desaparecida durante una semana luego de un naufragio en el río Güejar.
Torres Vásquez formaba parte de un grupo de 29 personas que realizaban una excursión turística en la región de los Llanos Orientales. El accidente ocurrió el 5 de junio cuando cuatro balsas y un kayak naufragaron a causa de una creciente súbita en el río.
En ese incidente fallecieron otras dos personas que fueron halladas el mismo día, mientras que Torres permaneció desaparecida hasta hoy. Según informó Harold Torres, sobrino y ahijado de la concejal, el cuerpo fue localizado a aproximadamente un kilómetro del lugar donde ocurrió la tragedia.
La concejal había viajado acompañada de su sobrina Johanna y el esposo de esta, Adolfo Restrepo, quienes también participaron en la excursión. “Era un plan que tenían hace mucho rato en mente. Ambas querían conocer ese destino”, indicó Harold Torres.
La Alcaldía de Mesetas y la Gobernación del Meta iniciaron investigaciones a la empresa operadora de turismo involucrada en la tragedia, además de suspender de manera indefinida las actividades de rafting en el río Güejar hasta que se garantice la seguridad de los visitantes y se implementen medidas que eviten la repetición de hechos similares.
El alcalde de Mesetas, Camilo Pulgarín, informó que tras el incidente se convocó un consejo de gestión del riesgo en coordinación con la gobernadora Rafaela, con el fin de evaluar las condiciones en que se desarrolló la actividad turística y determinar responsabilidades. “Vamos a tomar correctivos con los operadores turísticos y hacer la investigación por embarcar a estas personas sabiendo las condiciones climáticas”, señaló el mandatario local.
Por su parte, la Gobernación del Meta ha participado en el acompañamiento a las labores de búsqueda y rescate, y ha solicitado a la autoridad ambiental y de turismo verificar el cumplimiento de las normas de seguridad y protocolos por parte de la empresa que organizó el rafting. Se revisan aspectos como la capacitación de los guías, la evaluación previa de riesgos y la información brindada a los turistas.