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El próximo 26 de febrero comenzará la liquidación de Metrolínea, el sistema de transporte público de Bucaramanga y su área metropolitana, por lo que la administración local anunció una serie de acciones entre las que están cambios en las frecuencias y rutas de los buses para que se continúe prestando el servicio. Aunque prometen mejorar la operación, habitantes de Floridablanca y Piedecuesta han mostrado su preocupación, debido a que se quedarían sin rutas.
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Sobre el plan de emergencia para garantizar que se continúe prestando el servicio, el director del Área Metropolitana de Bucaramanga (AMB), Jhon Manuel Delgado Nivia, explicó que, ante los problemas que ha presentado Metrolínea, se trabaja en revisar la infraestructura existente, construir mejores relaciones con los transportadores, fortalecer el equipo de trabajo y analizar la oferta sobre la línea troncal.
En principio se busca que el sistema opere con 12 buses padrón, con capacidad para 80 pasajeros, que transitarán de manera continua, reduciendo los tiempos de espera de 45 minutos a cinco u ocho minutos. Sumado a esto, Delgado Nivia pidió a las secretarías de tránsito de los municipios, aumentar los controles para que no se invada el carril exclusivo del sistema de transporte.
Frente al alquiler de los buses que operarán, el director de la AMB indicó que “hemos recibido varias propuestas; sin embargo, entre las que más se acercaban a lo que nosotros estábamos planteando en ese nuevo y más eficiente esquema de rutas, fueron las de Metro de Medellín y un consorcio de empresas de transporte que tiene acceso a una flota de buses con mayor tecnología y que funcionan con gas natural y no diesel”.
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El cambio en las operaciones se hará en tres fases. En la primera se optimizará el recorrido entre las estaciones UIS y Provenza, lo que incluye las rutas complementarias a los municipios de Floridablanca, Piedecuesta y Girón, por lo que continuarán operando los servicios P10, P14, P3, RD27 y RD33.
En la segunda fase se extenderá la optimización desde Quebrada Seca hasta Piedecuesta, para lo que se incluirán 10 buses más al sistema. Mientras que en la tercera fase se completará el recorrido hasta Girón, para lo que se necesitará la instalación de un semáforo y la entrada de 10 buses más, con lo que quedará cubierta la operación de todo el sistema de transporte.
Para ejecutar el plan, Delgado Nivia señala que se requieren $19.000 millones, de los cuales $9.000 millones serán puestos por la alcaldía de Bucaramanga, mientras $5.000 millones saldrán del Ministerio de Transporte, por lo que el restante deberá salir de las alcaldías de Floridablanca, Piedecuesta, Girón y la Gobernación de Santander.
“Si todos los alcaldes del área metropolitana de Bucaramanga ‘se suben al bus’, empezamos las tres fases el 27 de febrero”, indicó el director de la AMB a Vanguardia. Si los municipios no aportan su parte, el funcionario aseveró que desde la otra semana no se prestará el servicio de transporte en los municipios.
“El Alcalde de Bucaramanga hizo un esfuerzo financiero enorme para garantizar la primera fase (entre las Estaciones UIS y Provenza). Les pido a los demás alcaldes que se sumen a esta solución que estamos planteando”, añadió Delgado. Por lo pronto, se espera que, en reunión, los mandatarios de los tres municipios tomen decisiones en lo que queda de la semana.