El marranito está hecho de acero, concreto y por supuesto, de arcilla. Su figura es la escala ampliada de la clásica alcancía con forma de cerdo y usada en todo el mundo. Su diámetro es de 10 metros y 30 centímetros, y la escultura, a la que se puede ingresar, consta de dos pisos, el primero que funcionará como una galería y el segundo que ya está en funcionamiento como una terraza con mirador donde los visitantes podrán tomarse fotos.
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El municipio de Ráquira, Boyacá, es también junto a La Chamba en el Tolima y El Carmen de Viboral en Antioquia, uno de los centros cerámicos de Colombia. La alcancía gigante se encuentra en el Parque de Arcilla, junto al glamping Paraíso de Arcilla, donde el propietario Guillermo Suárez emprendió con esta muestra de cerámica manteniendo esta forma de arte presente.
La idea, iniciada por el dueño del lugar, fue después complementada y construida con la ayuda de otros artesanos de la región. La construcción de la estructura del marrano ampliado tomó alrededor de 8 meses.
Además del marrano, se encuentran también otras figuras hechas principalmente de arcilla, como la mano del artesano, asimismo en escala ampliada. Cuentan también con un abecedario muisca y un Tótem de ubicación que señala en dirección a distintos destinos en el mundo.
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Andrés Felipe Velosa, administrador del sitio, contó que están en la realización de más esculturas con cerámica. Además, le cotó a El Espectador que ya se encuentran en el proceso con los Guinness World Récords para que su figura sea certificada como la más grande del mundo, ya que el récord actual lo tiene una alcancía en Ludwigsburg, Alemania, que tiene 5 metros y 58 centímetros de altura.