Grupos armados son los que más amenazan a los periodistas en el país: Defensoría

Imagen de referencia. Los periodistas encuestados temen por el avance de la censura y la presión de medios políticos y económicos, como de actores armados.

Foto: Red Cultural del Banco de la República

Un informe sobre las vulneraciones a los periodistas en Colombia, hecho por la Defensoría del Pueblo a partir de una encuesta a más de 300 comunicadores, evidencia problemáticas comunes como las vulneraciones al oficio, el efecto de las noticias falsas en el ejercicio del periodismo y la inclusión de nuevas tecnologías y la Inteligencia Artificial en los medios.

Vea: Informe Nacional sobre las vulneraciones a los DD. HH. de los periodistas en Colombia

El documento surge de encuestas hechas a 373 periodistas de todo el país, de los cuales el 44 % indicó que ha sufrido algún tipo de vulneración en el ejercicio de su profesión, la mayoría de las cuales se han dado de forma verbal (37,6 %), por redes sociales (20,8 %) y llamadas telefónicas (20,8 %). De igual forma, se destacan vulneraciones directas a la libertad de expresión, lo que incluye censuras; a la integridad física, es decir, amenazas o ataques; al buen nombre y la integridad psicológica, así como se presentan algunas de tipo económico y legales.

“Esta situación se agrava por las condiciones socioeconómicas a las que se enfrentan los periodistas, ya sea por la falta de profesionalización en sus estudios o debido a sus estratos económicos. Esto ha resultado en una precarización de la labor periodística, marcada por diversas situaciones que vulneran sus derechos económicos”, indica la Defensoría, que a la par agrega que por lo menos el 29 % de los encuestados recibe menos de un millón de pesos al mes, mientras que el 60 %, gana menos de dos millones de pesos mensuales.

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“Hay casos muy importantes de medios nativos digitales que demuestran que se puede hacer empresa, pero terminan siendo excepcionales, como la Silla Vacía o la Razón en Montería, que son medios con ejercicios periodísticos importantes, con estructuras que permiten buenos pagos a sus periodistas”, indicó Julio Solano, del equipo de comunicaciones de la Defensoría.

En cuanto a los actores que ejercen presiones contra la prensa, se destacan amenazas y ataques de grupos armados ilegales (28,5%) y narcotraficantes (11,9%). De igual forma, la Defensoría del Pueblo destaca que en más de la mitad de los casos, los periodistas no denuncian, ante la falta de garantías de seguridad y justicia en el país. Cifras de la Fundación para la Libertad de Prensa evidencian que en más del 80 % de los casos de periodistas asesinados no se ha llegado a condenar a los responsables.

“Es fundamental establecer una colaboración coordinada entre la Fiscalía General de la Nación, la Policía Nacional, la Unidad Nacional de Protección y otras entidades pertinentes. El objetivo es implementar estrategias articuladas que no solo prevengan las vulneraciones a los derechos de los periodistas, sino que también restauren su confianza en las instituciones”, indica la Defensoría.

En cuanto a la incursión de la inteligencia artificial en el periodismo, la encuesta evidencia que para los comunicadores, más que una amenaza al ejercicio del oficio, es también vista como una herramienta de apoyo para mejorar los productos periodísticos, en especial para la realización de piezas gráficas y materiales difundidos en redes sociales.

Mientras que una de las principales preocupaciones para los periodistas son las noticias falsas, que para los encuestados se han convertido en una gran amenaza para la credibilidad en los medios. De igual forma, les preocupan temas como la censura, las amenazas de grupos armados ilegales, así como las presiones provenientes de grupos políticos y económicos.

“Uno de cada cinco periodistas que contestó la encuesta señalaron haberse sentido vulnerados por líderes políticos y eso seguramente también reviste unos elementos importantes de análisis por profundizar. De igual forma ocurrió con los funcionarios públicos, en temas relacionados con acceso a la información”, aseguró Solano.

Por último, desde la Defensoría se hicieron una serie de recomendaciones, que incluyen la revisión y garantías de seguridad para los periodistas amenazados, que incluyan rutas de atención que prevengan vulneraciones y atiendan a quienes se vean afectados. De igual forma, se insta a formular una política pública para fortalecer los mecanismos de atención especial.