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En el barrio Paraíso de Lebrija, Santander, fue hallado el pasado fin de semana el cuerpo de Ana María Ruiz Quintero, de 29 años, quien se encontraba desnuda, con cuatro mordeduras en cara, pecho y genitales. Además, tenía un buzo amarrado en su cuello con aparentes indicios de estrangulamiento.
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El hallazgo fue hecho por la Policía de Bucaramanga a las 6:24 de la mañana del pasado 5 de abril, camino al sector conocido como “El basurero”, donde los habitantes hallaron el cuerpo sobre un camino. Al lugar llegaron uniformados que encontraron a la mujer boca arriba.
El levantamiento del cuerpo estuvo a cargo del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), mientras que la Sijín se encargó de recolectar pruebas de los hechos. Por el momento se investiga si la mujer habría sido víctima de violencia sexual, así como si fue víctima de feminicidio.
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Según testigos, la mujer era oriunda del municipio de Girón y solía pedir alimentos y bebidas a los habitantes de este sector, además de que trabajaba en oficios varios. De igual forma, la víctima fue vista la madrugada anterior al hallazgo, junto con dos hombres con los que caminó hacia la zona donde finalmente fue encontrada.
Por esto, la Policía se encuentra revisando las cámaras de seguridad de la zona para determinar la identidad de las dos personas que se encontraban con la víctima la noche anterior a su asesinato. “Se activó un sistema de investigación con inteligencia artificial para lograr la recolección de elementos materiales probatorios y evidencias físicas que permitan dar con el paradero y la captura de los sujetos que atentaron contra la vida de Ana María”, dijo a Blu Radio el coronel Misael Quiroga, comandante de Seguridad Ciudadana de la Policía Metropolitana.