Cerca de 100 parejas de niños bailarines de tango de Medellín buscan desde este lunes el Guinness récord de semilleros de tango y de paso lucharán para que la ciudad siga siendo considerada como la capital mundial del género. Lo harán en el parque Gaitán, en Manrique, al nororiente de la ciudad, tras seis meses de preparación.
John Esteven Gómez, a sus 12 años, lleva dos practicando el baile que es la pasión de su vida: “Estoy muy contento porque la gente vino a vernos. Ojalá que podamos lograr el Guinness récord”.
Cientos de personas se apostaron en las graderías de la cancha de baloncesto en el parque Gaitán. Todos atentos al espectáculo. A apoyar a los pequeños que pretenden hacer historia. Un sueño que comenzó a materializarse desde principio de año, cuando John Morales y otras personas se pusieron en la tarea continuar consolidando a Medellín como la capital mundial del tango. “El futuro del tango está en los semilleros. En la ciudad tenemos 16, con más de 150 parejas, con un muy buen nivel. Sólo aquí en Manrique tenemos cuatro semilleros”, comenta John Jairo.
Hace pocos días finalizó en la ciudad el Festival Internacional de Tango. Un evento que reunió a miles de personas de diferentes nacionalidades. En ninguna otra parte del mundo, ni siquiera en Argentina, se rinde tanto tributo a este género musical.
En 15 días, luego de enviar el material fotográfico y fílmico, la organización de los Guinness Récords dará su veredicto. Pero el de hoy es ya un día histórico para la ciudad, con más de 200 niños bailando tango de manera simultánea, en tributo a Carlos Gardel, el intérprete más grande de todos los tiempos de este género musical y quien falleció en Medellín en un accidente aéreo el 24 de junio de 1935, hace ya 74 años.