El municipio de Mocoa, en Putumayo, completa dos semanas sin el servicio de agua por tres derrumbes a cinco kilómetros de la bocatoma de Las Palmeras.
El sábado 16 de febrero, el 80% de la población quedó sin acueducto debido a los derrumbes en el río Mulato, que es el principal afluente que surte la bocatoma que suministra a la mayor parte de la comunidad.
Casi una semana después de la emergencia, un grupo compuesto por la Gobernación de Putumayo, la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres y la Guardia Indígena hizo un recorrido por la parte alta de Mulato, desde el sector de El Líbano hasta la bocatoma de Las Palmeras y la pendiente.
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“Se pudo apreciar que hay unos deslizamientos que están aportando material al cauce del río. Esto no representa riesgo para la fuente hídrica natural”, aseguró la UNGRD.
Los habitantes han señalado que, con las constantes lluvias, el río crece y lleva elementos como piedras y lodo que terminan taponando de nuevo el sistema de acueducto.
Para tratar de solucionar la falta de agua en las comunidades, se emprendieron algunas medidas como la repartición del líquido en las comunidades más afectadas como: Villa Daniela, Villa Colombia y El Progreso, que están ubicadas en la parte alta del sector.
El abastecimiento se ha hecho a través de 10 carrotanques, pero no es suficiente para los más de 50 mil habitantes. El agua ha sido entregada principalmente a entidades de socorro, hospitales, centros de salud, e instituciones educativas y del Estado.