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La Gobernación de Sucre ofrece una recompensa de $20 millones por información que permita dar con los responsables del asesinato de Diego Badel, quien era primo del alcalde de Betulia, donde ocurrió el crimen el fin de semana.
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Badel, de 35 años, se encontraba en una fiesta de 15 años en el barrio La Esperanza, hasta donde llegaron sujetos en moto que le habrían ordenado apagar la música, en respuesta a un supuesto panfleto del Clan del Golfo, que ordenaba un toque de queda el fin de semana.
Sin embargo, el comandante de la Policía de Sucre, coronel Aimer Alonso Triana, aseguró que ese panfleto era falso y señaló que primeras hipótesis advertirían que el asesinato de Badel no tendría relación con la fiesta, a lo que añadió que los sujetos en la motocicleta dispararon en tres ocasiones contra Badel, quien se encontraba en una tienda del barrio El Sabanal.
Sumado a esto, la Policía confirmó que Badel no tenía antecedentes judiciales, por lo que descartan una retaliación de grupos criminales.
Al respecto, Roberto Ortega Aldana, alcalde de Betulia, condenó el asesinato: “Es un hecho que nos ha golpeado duramente”, aseguró.
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Por su parte, la gobernadora de Sucre, Lucy García Montes, indicó que tras la amenaza por el toque de queda se realizó un consejo de seguridad, en el que la Fuerza Pública se comprometió a reforzar su presencia en los 26 municipios del departamento, para que los ciudadanos “puedan retomar sus actividades diarias con normalidad. Los sucreños cuentan con el respaldo total de la institucionalidad”.
El sepelio de Badel se llevó a cabo el lunes 7 de abril. Su féretro fue llevado por amigos y familiares, acompañados por la comunidad, quienes con globos de colores blanco y azul pidieron justicia.