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En 15 municipios de Huila, se realizaron este viernes manifestaciones en contra de la construcción más represas en el departamento, debido al inconformismo que ha generado la construcción y puesta en marcha de la represa del Quimbo.
En Neiva, la marcha se inició en la Universidad Surcolombiana y terminaron en la gobernación, donde los manifestantes dieron algunos discursos con el fin que el gobierno garantice la conservación de las fuentes hídricas y los recursos de la región.
El gobernador electo, Carlos Julio González dijo a La Nación de Huila “Hay argumentos, hay razones, hay afectaciones hoy claramente palpables, hay una insatisfacción generalizada en el Departamento y la necesidad de que a nivel nacional se comprenda cuál es el postulado de una región, un pueblo, de una comunidad que hoy defiende sus recursos naturales, su río y busca un desarrollo sostenible y sustentable”.
A la marcha se unieron los 15 municipios entre los que se encuentran Oporapa, Saladoblanco y Palestina entre otros, que se han visto afectados con la puesta en marcha de la represa, tras la inundación de grandes zonas agrícolas.
La construcción y llenado de la represa de El Quimbo ha causado gran problemática en el departamento debido al desplazamiento de varias personas que vivían en la zona de influencia de la represa, debido a que muchas aseguraron que no fueron reparadas. Además varios pescadores denunciaron que con el llenado de la hidroeléctrica se afecta la represa de Betania, principal punto de pesca.
Mientras que en el municipio de El Agrado, Emgesa no cumplió con la orden de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, de trasladar una parroquia considerada símbolo de identidad de varias comunidades en la zona, sino que prometió la construcción de una réplica en un nuevo lugar.