En entrevista con Blu Radio, el procurador afirmó que "ya se ha escuchado a las Farc: no se someterán a la justicia, porque aspiran a una absoluta impunidad (…) pero lo que se debe considerar ahora es que cualquier determinación interna debe considerar los compromisos internacionales. En el Estatuto de Roma, artículo 20, los países se comprometieron a investigar esa clase de delitos (crímenes de guerra). Si se pretende sustraer la responsabilidad de los autores de esos delitos se habilitaría entonces la jurisdicción internacional”.
Igualmente, dijo que un referendo constitucional (como el que se radicó en el Congreso con iniciativa del presidente Juan Manuel Santos) y una Asamblea Constituyente (como la que pretende la guerrilla) “podría incurrir en fraude a la ley si se desconocen los compromisos internacionales”.
Ordóñez recordó que la justicia ya ha proferido numerosas decisiones contra los integrantes del secretariado de las Farc y ello tampoco se puede desconocer. “Es claro que para transitar de la guerra a la paz debe existir unos instrumentos que le otorguen algún interés a quienes tienen las armas. Eso es lo que ha venido haciendo la justicia transicional que no genera impunidad –se equivocan los que piensen así- allí se requieren unos máximos de verdad y medios de reparación (…)”, explicó y añadió que no se trata de un dilema de quienes están contra la paz sino es una discusión en torno a la impunidad.
En palabras del procurador, lo que se pretende con el Marco Jurídico para la Paz es “caricaturizar la justicia transicional (…) Desde 1997 ha existido la justicia transición, en el cual quienes hayan sido responsables de delitos de lesa humanidad no han sido beneficiados con amnistías e indultos, sólo se han beneficiado con reducción de la pena -como en el caso de Justicia y Paz-, pero sin impunidad”.
Para el procurador la dosis de impunidad está en el Marco cuando se dice que se escogerán sólo ciertos casos, tipos de delitos y responsables para investigar y juzgar. “Habrán responsables que quedarán beneficiado con la suspensión de la pena, no pagarían un solo día de cárcel o se renunciaría la persecución judicial, eso es inadmisible”.
“Si el Marco Jurídico para la Paz queda como está redactado estaríamos genera una paz no sostenible”, insistió el Ordóñez al señalar que se debe tener en cuenta “hasta la idiosincrasia colombiana (…) porque las Farc no son el IRA y esto no es Irlanda”.