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En las últimas horas, las autoridades venezolanas confirmaron el hallazgo de otros cinco cadáveres en una fosa común ubicada en una trocha de La Mulata, municipio de Ureña, estado Táchira, zona limítrofe con Colombia.
De acuerdo con versiones preliminares, los cuerpos corresponderían a víctimas de grupos paramilitares que delinquen en la frontera colombo-venezolana. Sin embargo, no se ha determinado la nacionalidad e identidad de las mismas.
Hasta el momento sólo se ha podido establecer que varios de los cuerpos -12 en total- presentan tiros de gracia, vestían prendas militares y botas de campaña.
El lunes fueron encontrados siete cuerpos, de seis hombres y una mujer, al parecer asesinados seis meses atrás.
Las autoridades de Venezuela enviaron a la zona, que es considerada de alta peligrosidad, una comisión especial del Cuerpo de Investigaciones Penales y Criminales para encontrar a los autores del crimen.
En la región operan varios grupos guerrilleros, por lo que las autoridades, basados en las versiones de algunos habitantes de la zona, no descartan que los cuerpos puedan ser de ciudadanos colombianos.