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La cadena de supermercados D1 rechazó las amenazas que el grupo armado ilegal ELN les hizo en los departamentos del Chocó y Risaralda. Las amenazas difundidas por el Frente de guerra occidental declararon a las tiendas ubicadas en ambas regiones como objetivo militar y anunciaron ataques a vehículos que transporten mercancías a sus tiendas.
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La empresa, a través de un comunicado, confirmó que recibieron las amenazas directamente y pidió al Gobierno medidas urgentes para proteger la vida de sus trabajadores, clientes, aliados y proveedores y garantizar el funcionamiento de sus operaciones en estas zonas.
“Rechazamos estos actos y hacemos un llamado urgente al Gobierno y a las autoridades competentes para que se garantice la seguridad y continuidad de nuestras actividades en beneficio de los ciudadanos en estas regiones“, dice el comunicado.
Según el grupo armado, Tiendas D1 se han negado a pagar el “impuesto de guerra”. En las amenazas el grupo advirtió que atacará o quemará los vehículos que ingresen mercancía a tiendas de la cadena, principalmente donde mantienen control territorial.
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“En la actualidad, los encargados de las Tiendas D1 en el Chocó mantienen su negativa de NO pagar el impuesto de guerra y mediante artimañas están engañando a empresas de transporte de carga privada y a particulares, contratándolos para que lleven sus productos hasta los supermercados en el departamento”, agregaron en el comunicado de D1.
Cerca de 15 furgones con alimentos son los que ingresan al Chocó cada día. Las advertencias provocaron que varios conductores se nieguen a realizar los recorridos por temor a represalias, lo que podría afectar el abastecimiento en municipios apartados.
Walter Arango, vocero de los transportadores en Quibdó, confirmó que se ha paralizado parte de la operación logística por el miedo. “Los conductores no quieren entrar al Chocó por temor a ataques. Ya se han cancelado varios despachos”, dijo a Blu Radio.
Las autoridades iniciaron investigaciones y coordinan acciones con la fuerza pública para mitigar los riesgos. Mientras que D1 reiteró su llamado al Gobierno para que actúe de manera inmediata.