Un cabo del ejército perdió sus piernas al pisar una mina antipersona cuando adelantaba con su unidad militar operaciones en la vereda Maracaibo, zona rural de Hacarí, Norte de Santander.
El suboficial, miembro de la Fuerza de Tarea Vulcano, fue identificado como el cabo segundo Wilmer Martínez Waldo, quien sufrió amputación de sus extremidades.
La onda explosiva también afectó a dos soldados profesionales. El soldado Javier Cruz Paz presentó una lesión menor en la pierna derecha mientras que su compañero Herlembin García Vanegas sufrió un trauma en sus oídos a causa del estallido. Los afectados fueron trasladados a la ciudad de Cúcuta para recibir atención médica.
El representante del Ministerio Público recogió declaraciones de campesinos que aseguran que sus casas fueron impactadas. Además, informó que el centro de la zona quedó abandonado tras la decisión de los habitantes de salir a buscar protección en el refugio humanitario que está activado desde el mes de marzo. Este diario conoció que otras familias se desplazaron hacia el casco urbano de Hacarí y para Ocaña en busca de sus familiares.