Noticias

Últimas Noticias

    Política

    Judicial

      Economía

      Mundo

      Bogotá

        Entretenimiento

        Deportes

        Colombia

        El Magazín Cultural

        Salud

          Ambiente

          Investigación

            Educación

              Ciencia

                Género y Diversidad

                Tecnología

                Actualidad

                  Reportajes

                    Historias visuales

                      Colecciones

                        Podcast

                          Opinión

                          Opinión

                            Editorial

                              Columnistas

                                Caricaturistas

                                  Lectores

                                  Blogs

                                    Suscriptores

                                    Recomendado

                                      Contenido exclusivo

                                        Tus artículos guardados

                                          Somos El Espectador

                                            Estilo de vida

                                            La Red Zoocial

                                            Gastronomía y Recetas

                                              La Huerta

                                                Moda e Industria

                                                  Tarot de Mavé

                                                    Autos

                                                      Juegos

                                                        Pasatiempos

                                                          Horóscopo

                                                            Música

                                                              Turismo

                                                                Marcas EE

                                                                Colombia + 20

                                                                BIBO

                                                                  Responsabilidad Social

                                                                  Justicia Inclusiva

                                                                    Desaparecidos

                                                                      EE Play

                                                                      EE play

                                                                        En Vivo

                                                                          La Pulla

                                                                            Documentales

                                                                              Opinión

                                                                                Las igualadas

                                                                                  Redacción al Desnudo

                                                                                    Colombia +20

                                                                                      Destacados

                                                                                        BIBO

                                                                                          La Red Zoocial

                                                                                            ZonaZ

                                                                                              Centro de Ayuda

                                                                                                Newsletters
                                                                                                Servicios

                                                                                                Servicios

                                                                                                  Empleos

                                                                                                    Descuentos

                                                                                                      Idiomas

                                                                                                      Cursos y programas

                                                                                                        Más

                                                                                                        Cromos

                                                                                                          Vea

                                                                                                            Blogs

                                                                                                              Especiales

                                                                                                                Descarga la App

                                                                                                                  Edición Impresa

                                                                                                                    Suscripción

                                                                                                                      Eventos

                                                                                                                        Pauta con nosotros

                                                                                                                          Avisos judiciales

                                                                                                                            Preguntas Frecuentes

                                                                                                                              Contenido Patrocinado
                                                                                                                              12 de octubre de 2013 - 04:00 p. m.

                                                                                                                              Un río de vida buscando la muerte

                                                                                                                              El Espectador acompañó una peregrinación que buscaba, sin armas, entrar al corazón paramilitar en el Urabá antioqueño.

                                                                                                                              Camilo Segura Álvarez

                                                                                                                              El padre Javier Giraldo y los campesinos de Urabá por las montañas de la cordillera de Abibe. / Jesús Abad Colorado - Cortesía

                                                                                                                              El pasado 31 de agosto Buenaventura Hoyos, un campesino de la vereda La Hoz, en el municipio de Apartadó (Urabá antioqueño, noroccidente de Colombia), fue retenido por el grupo paramilitar Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC). Según organismos de Derechos Humanos, a este labriego se le vio por última vez el 3 de septiembre, atado por sus captores, camino al departamento de Córdoba. Al parecer, Hoyos habría sido víctima de un reclutamiento forzado. Su familia huyó de La Hoz, al igual que otras 50 personas que desde finales de agosto han visto a un grupo de más de dos centenares de paramilitares que se campean entre Nueva Antioquia (corregimiento de Turbo, Antioquia) y varias veredas que forman parte de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó.

                                                                                                                              El Espectador acompañó una “Peregrinación por la vida” protagonizada por la Comunidad de Paz, representantes indígenas de diferentes puntos del país, organismos de derechos humanos y acompañantes internacionales. El objetivo de la movilización de cerca de 120 personas era concreto: buscar a los paramilitares en una base, denunciada por las comunidades, ubicada en la vereda de Sabaleta; recoger los testimonios de las personas que han visto el accionar de este grupo, conocer la suerte de Buenaventura Hoyos; enfrentar a los victimarios sin armas, escuchar las razones de las amenazas que han emitido contra la comunidad y ejercer la dignidad que han cultivado durante los 16 años que lleva su experiencia de neutralidad y paz frente a los diversos actores del conflicto.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                               La movilización, que comenzó el domingo 6 de octubre, se dividió en dos grupos. Ambos partieron de San Josecito (el principal de los 11 asentamientos de la Comunidad de Paz) con destino a Nueva Antioquia, el lugar que en la región se conoce como “el centro de operaciones” del paramilitarismo. El primero, con cerca de 70 personas, salió a pie y en mula, cruzando por la vereda de La Unión para llegar el día lunes al casco urbano de Nueva Antioquia. El otro grupo, en bus, llegó al mismo destino al día siguiente. Allí, el verdadero comienzo de una caminata que duraría cuatro días más y que, a su paso, evidenció que la Comunidad de Paz tiene la razón: en Urabá está tomando fuerza un grupo ilegal que promete continuar con una historia de violencia contra las organizaciones campesinas bajo el manto de una supuesta guerra antisubversiva.

                                                                                                                               En Nueva Antioquia la “calma chicha” es evidente. En este pequeño poblado la Policía tiene dos estaciones fuertemente custodiadas. Un puesto de avanzada sobre la loma contigua al casco urbano y una estación sobre la avenida principal dan cuenta del conflicto armado. A esta última llegó una comisión de veedores internacionales y periodistas que acompañó al sacerdote jesuita Javier Giraldo (líder y acompañante histórico de la Comunidad de Paz) a dialogar con la Fuerza Pública. “Como sólo tengo jurisdicción sobre el casco urbano, no puedo dar fe de que aquí operen bandas criminales (nunca usó la palabra paramilitares). En los últimos meses, en puestos de control, hemos capturado a dos personas con antecedentes judiciales. La presencia del Estado acá somos nosotros, no hay ni corregidor. Este es un pueblo abandonado”, dijo Adolfo Renalh, el intendente que comanda la estación.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              Entonces, sin razón oficial sobre la presencia de las AGC, la Comisión partió hacia la vereda de Rodoxalí (Apartadó) donde, en días anteriores, los paramilitares habían advertido sobre su “necesidad” de “ejercer control en la región”. En un camino que los campesinos recorren en tres horas, la peregrinación tardó siete. Al llegar, los testimonios de los pobladores de esta vereda, que no es parte de la comunidad, aunque denotaban alegría daban cuenta de los horrores de la guerra: “Qué alegría que hayan venido, nos sentimos acompañados. Pero sentimos miedo porque parece que desde Nueva Antioquia les avisaron que ustedes (la peregrinación) venían hacia acá, se fueron hacia el monte y, cuando se vayan, no sabemos qué vaya a pasar”, confesó una de las personas que les brindó hospedaje a varios de los campesinos de San José de Apartadó.

                                                                                                                               Al día siguiente, el martes, una avanzada de los marchantes fue hacia Sabaleta. Allí los testimonios recogidos por el padre fueron más específicos y hablaron de brazaletes con la sigla AGC, de armas largas, de encapuchados y operativos, por lo menos ignorados, por las tropas del Ejército. Sin razón de la ubicación exacta del grupo ilegal, el destacamento de no más 40 campesinos volvió a Rodoxalí, para partir de allí, el miércoles, hacia Mulatos, epicentro de la dignidad de la Comunidad de Paz. Con la salida de los últimos marchantes y cabalgantes sonaron, provenientes de las lomas que rodean la vereda, por lo menos tres tiros de fusil. Una manera de decir: adiós, no nos vieron, pero aquí estamos.

                                                                                                                               El camino hacia la vereda Mulatos, destino final del miércoles, tiene menos dificultades topográficas. El trecho, de cinco horas, se vio interrumpido por la llegada a un punto, en límites de la vereda La Hoz, que probó una vez más la presencia paramilitar. Un campamento evidentemente abandonado recientemente por las AGC con pinturas de la sigla y cambuches rudimentarios. A menos de 400 metros, un campamento militar en funcionamiento. Los oficiales que salieron al paso de la caravana advirtieron que estaban allí por las dificultades del orden público, pero, como la Policía de Nueva Antioquia, negaron conocer la existencia de dicha “banda criminal”.

                                                                                                                               Para llegar a Mulatos hay que cruzar repetidamente por lo menos 10 brazos del río que lleva el mismo nombre. Allí, en la vereda, el proyecto de resistencia de la comunidad se hace evidente: la Aldea de Paz Luis Eduardo Guerra, líder asesinado en la  masacre cometida contra 3 niños y 5 adultos (en las veredas de Mulatos y La Resbalosa), según sentencia judicial, por miembros del Ejército Nacional y de los paramilitares confederados en las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc) el 21 de febrero de 2005.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                               “Esta aldea la construimos como homenaje a quienes cayeron ese día, pero también a los más de 200 muertos y desaparecidos que hemos puesto durante los últimos 16 años. Aquí no sólo hemos puesto en marcha nuestro modelo de autosostenibilidad agrícola y educativa, sino demostrado que podemos vivir en un mundo mejor, construido por nosotros como resistencia frente al abandono y la violencia del Estado”, dice Arley Tuberquia, miembro del Consejo de la Comunidad de Paz.

                                                                                                                               El jueves, en Mulatos, la Peregrinación se dividió en dos. Un grupo, conformado por las comisiones indígenas y miembros de la Comunidad de Paz, se quedó en la Universidad de la Resistencia encaminada a la autosostenibilidad y el fortalecimiento de la neutralidad frente al conflicto. La otra partió para cerrar el círculo, para volver a San Josecito.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                               Pasando por Chontalito, el punto más alto del camino, el paisaje es increíble. Desde uno de los puntos altos de la cordillera de Abibe (una de las tres ramificaciones de la cordillera Occidental) se ve el Golfo de Urabá y el resultado de esta guerra: el monocultivo de banano, los megaproyectos de teca y la reducción de la frontera selvática. Pasando por lo alto de la cordillera, quienes acompañan a periodistas y extranjeros, lamentan que los invitados no hayan visto lo que ellos ven a diario: el avance de los señores de la muerte. Pero celebran la vida, celebran que están unidos y que “aunque no sabemos si estaremos vivos o la comunidad persista en 10 o 15 años, el tiempo nos dará la razón. Algún día, en vez de señalarnos, tendrán que reconocer la fuerza ética y moral de nuestra comunidad al declarar su neutralidad”, dice Berta Tuberquia, quien, como la mayoría de los peregrinos, ha visto correr la sangre de su familia por las montañas de Urabá.

                                                                                                                              csegura@elespectador.com

                                                                                                                               

                                                                                                                              @CamiloSeguraA

                                                                                                                              El padre Javier Giraldo y los campesinos de Urabá por las montañas de la cordillera de Abibe. / Jesús Abad Colorado - Cortesía

                                                                                                                              El pasado 31 de agosto Buenaventura Hoyos, un campesino de la vereda La Hoz, en el municipio de Apartadó (Urabá antioqueño, noroccidente de Colombia), fue retenido por el grupo paramilitar Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC). Según organismos de Derechos Humanos, a este labriego se le vio por última vez el 3 de septiembre, atado por sus captores, camino al departamento de Córdoba. Al parecer, Hoyos habría sido víctima de un reclutamiento forzado. Su familia huyó de La Hoz, al igual que otras 50 personas que desde finales de agosto han visto a un grupo de más de dos centenares de paramilitares que se campean entre Nueva Antioquia (corregimiento de Turbo, Antioquia) y varias veredas que forman parte de la Comunidad de Paz de San José de Apartadó.

                                                                                                                              El Espectador acompañó una “Peregrinación por la vida” protagonizada por la Comunidad de Paz, representantes indígenas de diferentes puntos del país, organismos de derechos humanos y acompañantes internacionales. El objetivo de la movilización de cerca de 120 personas era concreto: buscar a los paramilitares en una base, denunciada por las comunidades, ubicada en la vereda de Sabaleta; recoger los testimonios de las personas que han visto el accionar de este grupo, conocer la suerte de Buenaventura Hoyos; enfrentar a los victimarios sin armas, escuchar las razones de las amenazas que han emitido contra la comunidad y ejercer la dignidad que han cultivado durante los 16 años que lleva su experiencia de neutralidad y paz frente a los diversos actores del conflicto.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                               La movilización, que comenzó el domingo 6 de octubre, se dividió en dos grupos. Ambos partieron de San Josecito (el principal de los 11 asentamientos de la Comunidad de Paz) con destino a Nueva Antioquia, el lugar que en la región se conoce como “el centro de operaciones” del paramilitarismo. El primero, con cerca de 70 personas, salió a pie y en mula, cruzando por la vereda de La Unión para llegar el día lunes al casco urbano de Nueva Antioquia. El otro grupo, en bus, llegó al mismo destino al día siguiente. Allí, el verdadero comienzo de una caminata que duraría cuatro días más y que, a su paso, evidenció que la Comunidad de Paz tiene la razón: en Urabá está tomando fuerza un grupo ilegal que promete continuar con una historia de violencia contra las organizaciones campesinas bajo el manto de una supuesta guerra antisubversiva.

                                                                                                                               En Nueva Antioquia la “calma chicha” es evidente. En este pequeño poblado la Policía tiene dos estaciones fuertemente custodiadas. Un puesto de avanzada sobre la loma contigua al casco urbano y una estación sobre la avenida principal dan cuenta del conflicto armado. A esta última llegó una comisión de veedores internacionales y periodistas que acompañó al sacerdote jesuita Javier Giraldo (líder y acompañante histórico de la Comunidad de Paz) a dialogar con la Fuerza Pública. “Como sólo tengo jurisdicción sobre el casco urbano, no puedo dar fe de que aquí operen bandas criminales (nunca usó la palabra paramilitares). En los últimos meses, en puestos de control, hemos capturado a dos personas con antecedentes judiciales. La presencia del Estado acá somos nosotros, no hay ni corregidor. Este es un pueblo abandonado”, dijo Adolfo Renalh, el intendente que comanda la estación.

                                                                                                                              Read more!

                                                                                                                              Entonces, sin razón oficial sobre la presencia de las AGC, la Comisión partió hacia la vereda de Rodoxalí (Apartadó) donde, en días anteriores, los paramilitares habían advertido sobre su “necesidad” de “ejercer control en la región”. En un camino que los campesinos recorren en tres horas, la peregrinación tardó siete. Al llegar, los testimonios de los pobladores de esta vereda, que no es parte de la comunidad, aunque denotaban alegría daban cuenta de los horrores de la guerra: “Qué alegría que hayan venido, nos sentimos acompañados. Pero sentimos miedo porque parece que desde Nueva Antioquia les avisaron que ustedes (la peregrinación) venían hacia acá, se fueron hacia el monte y, cuando se vayan, no sabemos qué vaya a pasar”, confesó una de las personas que les brindó hospedaje a varios de los campesinos de San José de Apartadó.

                                                                                                                               Al día siguiente, el martes, una avanzada de los marchantes fue hacia Sabaleta. Allí los testimonios recogidos por el padre fueron más específicos y hablaron de brazaletes con la sigla AGC, de armas largas, de encapuchados y operativos, por lo menos ignorados, por las tropas del Ejército. Sin razón de la ubicación exacta del grupo ilegal, el destacamento de no más 40 campesinos volvió a Rodoxalí, para partir de allí, el miércoles, hacia Mulatos, epicentro de la dignidad de la Comunidad de Paz. Con la salida de los últimos marchantes y cabalgantes sonaron, provenientes de las lomas que rodean la vereda, por lo menos tres tiros de fusil. Una manera de decir: adiós, no nos vieron, pero aquí estamos.

                                                                                                                               El camino hacia la vereda Mulatos, destino final del miércoles, tiene menos dificultades topográficas. El trecho, de cinco horas, se vio interrumpido por la llegada a un punto, en límites de la vereda La Hoz, que probó una vez más la presencia paramilitar. Un campamento evidentemente abandonado recientemente por las AGC con pinturas de la sigla y cambuches rudimentarios. A menos de 400 metros, un campamento militar en funcionamiento. Los oficiales que salieron al paso de la caravana advirtieron que estaban allí por las dificultades del orden público, pero, como la Policía de Nueva Antioquia, negaron conocer la existencia de dicha “banda criminal”.

                                                                                                                               Para llegar a Mulatos hay que cruzar repetidamente por lo menos 10 brazos del río que lleva el mismo nombre. Allí, en la vereda, el proyecto de resistencia de la comunidad se hace evidente: la Aldea de Paz Luis Eduardo Guerra, líder asesinado en la  masacre cometida contra 3 niños y 5 adultos (en las veredas de Mulatos y La Resbalosa), según sentencia judicial, por miembros del Ejército Nacional y de los paramilitares confederados en las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc) el 21 de febrero de 2005.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                               “Esta aldea la construimos como homenaje a quienes cayeron ese día, pero también a los más de 200 muertos y desaparecidos que hemos puesto durante los últimos 16 años. Aquí no sólo hemos puesto en marcha nuestro modelo de autosostenibilidad agrícola y educativa, sino demostrado que podemos vivir en un mundo mejor, construido por nosotros como resistencia frente al abandono y la violencia del Estado”, dice Arley Tuberquia, miembro del Consejo de la Comunidad de Paz.

                                                                                                                               El jueves, en Mulatos, la Peregrinación se dividió en dos. Un grupo, conformado por las comisiones indígenas y miembros de la Comunidad de Paz, se quedó en la Universidad de la Resistencia encaminada a la autosostenibilidad y el fortalecimiento de la neutralidad frente al conflicto. La otra partió para cerrar el círculo, para volver a San Josecito.

                                                                                                                              No ad for you

                                                                                                                               Pasando por Chontalito, el punto más alto del camino, el paisaje es increíble. Desde uno de los puntos altos de la cordillera de Abibe (una de las tres ramificaciones de la cordillera Occidental) se ve el Golfo de Urabá y el resultado de esta guerra: el monocultivo de banano, los megaproyectos de teca y la reducción de la frontera selvática. Pasando por lo alto de la cordillera, quienes acompañan a periodistas y extranjeros, lamentan que los invitados no hayan visto lo que ellos ven a diario: el avance de los señores de la muerte. Pero celebran la vida, celebran que están unidos y que “aunque no sabemos si estaremos vivos o la comunidad persista en 10 o 15 años, el tiempo nos dará la razón. Algún día, en vez de señalarnos, tendrán que reconocer la fuerza ética y moral de nuestra comunidad al declarar su neutralidad”, dice Berta Tuberquia, quien, como la mayoría de los peregrinos, ha visto correr la sangre de su familia por las montañas de Urabá.

                                                                                                                              csegura@elespectador.com

                                                                                                                               

                                                                                                                              @CamiloSeguraA

                                                                                                                              Por Camilo Segura Álvarez

                                                                                                                              Ver todas las noticias
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Read more!
                                                                                                                              Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
                                                                                                                              Aceptar