Los usuarios quieren cambiar el chip. El maltrato, el odio y la falta de cortesía en redes nos está silenciando. Postear y trinar con palabras que tienen como único objetivo lesionar al otro, humillarlo, nos proponen un reto, pues las redes sin lugar a duda son un lugar más de conversación para construir paz y ciudadanía.
Prueba de la necesidad de este “desarme digital”, fue la iniciativa que la Conversación más Grande del Mundo promovió con @SíalaPaz a propósito de la dejación de armas por parte de las FARC. Cinco etiquetas, cinco días, “#FirmeXLaPaz”, “#SinArmas”, #PorLaPaz, #YoMeDesarmo y #AdiosALasArmas que tenían como propósito reflexionar de manera colectiva sobre este momento de transición que vive el país.
El desarme consiste en:
- Comprometerse a dejar de disparar insultos en post y trinos.
- Renunciar a descargar odio contra aquellos que piensan diferente.
- No volver a detonar calumnias o noticias falsas para desvirtuar a otros.
- No lanzar dardos de discriminación contra aquellos que son diferentes a mí.
Desarmar nuestras palabras no significa estar de acuerdo, significa respetar la humanidad que hay en el otro. Esa es la base de la construcción de paz