Hoy es un día decisivo para la democracia colombiana: la ciudadanía elegirá al presidente que gobernará durante los próximos cuatro años a un país con álgidas problemáticas sociales, acentuadas por la pandemia. En estas intrincadas condiciones sociales, económicas y políticas, las propuestas programáticas que se planteen para el sector educativo juegan un papel sustancial, por su rol como medio trascendente de la transformación social y promotor del desarrollo económico, científico, tecnológico y social.
En esta gesta electoral polarizada prevaleció la campaña sucia y negra; los colombianos no tuvimos la oportunidad de ser partícipes de debates serios en los cuales se discutiera sobre las propuestas programáticas, sino que prevaleció la guerra de improperios en las redes sociales.
Al revisar las iniciativas programáticas de los candidatos en el sector de la educación, se encuentra que Sergio Fajardo, de Compromiso Ciudadano, propone que la educación pase de ser una “fábrica de reproducción de las desigualdades a una fábrica de creación de oportunidades”, con políticas de Estado para cerrar brechas desde la más temprana edad, mejoramiento de la calidad y la infraestructura a 10.000 instituciones de educación básica y media. También aspira a aumentar la cobertura de la educación superior pública a través de la financiación y de mentorías para estudiantes vulnerables. Igualmente, reformar al Icetex para que otorgue becas y créditos con pagos contingentes al ingreso.
El aspirante por la Coalición Equipo por Colombia, Federico Gutiérrez, propone un plan pedagógico especializado para la nivelación de los estudiantes cuyo aprendizaje se afectó con la pandemia, reducir la deserción a una tasa de 2,5 %, gratuidad en educación superior para jóvenes de estratos 1, 2 y 3, revisión y ajuste de la política de calidad y pertinencia e incremento de recursos para promover la calidad educativa, entre otras. Al Icetex lo transformaría e implementaría nuevos mecanismos de pago de créditos con condiciones favorables, así como subsidios, condonación de deudas y suspensión de intereses.
El candidato por el Pacto Histórico, Gustavo Petro, plantea acceso universal y gratuito a la atención integral a la primera infancia, educación superior pública, gratuita y de calidad, fortalecimiento de la red de universidades públicas, el SENA y los colegios de educación media. También, mayor articulación de la investigación y la extensión entre sí y con el Sistema de Ciencia y Tecnología. Asimismo, aumentar el presupuesto para ampliar y mejorar infraestructura y conectividad, consolidar políticas de bienestar estudiantil, crear nuevas universidades y programas, e implementar un plan de salvamento para liberar de deudas a usuarios del Icetex y transformarlo para financiar estudios en el exterior.
Por su parte, Rodolfo Hernández, de la Liga de Gobernantes Anticorrupción, se compromete a asignar el más alto presupuesto nacional a la educación, reformar el Sistema de Aseguramiento de la Calidad Educativa, calidad educativa para el área rural y mayor bienestar para los docentes, entre otras. Igualmente, pretende crear nuevos centros educativos superiores y aumentar transferencias financieras a universidades públicas. Fortalecería al Icetex para que financie, con préstamos a bajos intereses, a quienes deseen estudiar en universidades privadas o extranjeras.
Es fundamental que la decisión que tomemos hoy, al ejercer nuestro derecho al voto, sea fruto del análisis objetivo de las propuestas, las capacidades y la experiencia de los candidatos.
*Rector de Unisimón.