“La lectura nos permite explorar lugares desconocidos e imaginar otros mundos, haciendo de cada sesión del laboratorio de lectura una experiencia enriquecedora y diversa para todos los participantes”, dice la gestora cultural y social de la Biblioteca Juan Roa Vásquez de la Universidad, Alejandra González Lasso.
Como explica la académica, leer es explorar, imaginar, conocer, descubrir, crear, viajar, desarrollar un pensamiento crítico… en fin, la lectura es un hábito con beneficios presentes en todas las etapas de la vida. Por esto, instituciones de educación superior como la Universidad El Bosque buscan acercar su biblioteca, a través del Laboratorio de Lectura y el programa Vecinos, a las comunidades aledañas.
En diálogo con El Espectador, González Lasso explicó los programas que ofrece la universidad para incentivar el hábito de la lectura, la recepción por parte de la comunidad y la importancia de iniciativas como estas, que generan espacio de diálogo, intercambio de ideas y desarrollo cultural y educativo.
¿Qué es el Laboratorio de lectura y el programa Vecinos?
El Laboratorio de Lectura de la Universidad El Bosque es un espacio dedicado a quienes desean adentrarse en la lectura o profundizar en su relación con los libros, experimentando cómo esta actividad se conecta con el cuerpo y la experiencia personal. Más allá de lo educativo, este proyecto, liderado por Alejandra González Lasso, gestora cultural y social de la Biblioteca, y Juanita Bautista Guerra, docente del Departamento de Humanidades, tiene un fuerte enfoque en el impacto social y cultural dentro y fuera de la comunidad estudiantil y sus alrededores. Está abierto a toda la comunidad universitaria y a cualquier persona interesada, el laboratorio se alinea con el enfoque biopsicosocial de la universidad, reflejando su compromiso con la sociedad. Las sesiones del laboratorio de lectura, se realizan el último viernes de cada mes en la biblioteca, ofreciendo a los participantes la oportunidad de compartir experiencias significativas, haciendo un encuentro donde diversas perspectivas convergen alrededor de los libros.
El programa Vecinos es una iniciativa diseñada para extender los servicios bibliotecarios a las personas que viven en las cercanías de la institución. Además, tiene como objetivo principal crear un impacto positivo en la comunidad local, promoviendo el acceso a recursos educativos y culturales, fortaleciendo los lazos entre la universidad y los habitantes del sector.
De igual forma, busca no solo ampliar el acceso a los recursos educativos, sino también fortalecer la integración y la colaboración entre la universidad y la comunidad local. Al abrir sus puertas y compartir sus recursos, la Universidad El Bosque contribuye al desarrollo cultural y educativo del entorno, promoviendo el conocimiento y el aprendizaje como pilares fundamentales para el crecimiento y el bienestar.
Hablemos sobre la creación de este proyecto ¿A cuántas personas beneficia?
El programa Vecinos tiene un impacto en 351 personas y, gracias a todas las iniciativas generadas por el equipo de la Biblioteca, este año se han inscrito 88. En el laboratorio de lectura llevamos cuatro sesiones donde aproximadamente nos han acompañado alrededor de unos 15 participantes.
¿Cómo ha sido el acercamiento de las personas al programa?
La respuesta de la comunidad al programa Vecinos ha sido muy positiva. Las personas se han mostrado agradecidas por tener acceso a los recursos y a las actividades que ofrecen la Biblioteca y la Universidad El Bosque, y han participado activamente en los eventos y talleres. La colaboración con el laboratorio de lectura, por ejemplo, ha permitido que tanto los miembros de la comunidad como los estudiantes de la universidad compartan experiencias y conocimientos.
Para la universidad ¿por qué es importante contar con este tipo de programas?
Para la Universidad El Bosque, iniciativas como el programa Vecinos y el laboratorio de lectura son fundamentales porque refuerzan el compromiso de la institución con la responsabilidad social y el bienestar de su entorno. A través de estas iniciativas, la universidad no solo extiende sus recursos más allá del campus, sino que también fortalece los lazos con la comunidad local y la comunidad universitaria. Estos programas contribuyen al desarrollo cultural y educativo, brindando herramientas para el crecimiento personal, la construcción de pensamiento crítico, y la promoción del diálogo y la integración social. De esta manera, la Universidad impacta positivamente en la vida de las personas, tanto dentro como fuera de la institución.
¿Por qué es importante fomentar la lectura en todas las etapas de la vida?
Fomentar la lectura en todas las etapas de la vida es fundamental porque contribuye al desarrollo cognitivo, emocional y social de las personas. La lectura no solo enriquece el conocimiento y el vocabulario, sino que también fortalece la imaginación, el pensamiento crítico y la capacidad de empatizar con otros. Como señala Alberto Manguel, “la lectura es, sin duda, una de las formas más antiguas de comunión espiritual, de acuerdo entre dos conciencias que están separadas en el tiempo y el espacio” (Manguel, Una historia de la lectura). Además, al promover este hábito desde la niñez hasta la adultez, se crean rutinas que acompañan a las personas a lo largo de su vida, permitiéndoles enfrentarse a los desafíos del día a día con una mayor capacidad de reflexión y una perspectiva más amplia.