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Siete municipios de Cundinamarca agrupan la mitad de los comparendos impuestos en todo el departamento desde que inició el aislamiento preventivo obligatorio, como forma de contener la propagación del nuevo coronavirus. Se trata de Soacha, Mosquera, Madrid, Fusagasugá, Facatativá, Girardot y Zipaquirá, municipios que tendrán un aumento en el número de uniformados en las calles, para vigilar el cumplimiento de las restricciones de movilidad durante la cuarentena.
Desde este miércoles, según anunció el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García Bustos, se empezará a aumentar el pie de fuerza en los municipios señalados. La medida irá hasta que los habitantes de esos territorios empiecen a cumplir con la cuarentena y disminuya el número de comparendos impuestos por quebrantar la norma.
El gobernador, si bien reconoce que hay miles de habitantes de esos municipios que trabajan en Bogotá o en empresas de producción en la Sabana, y están dentro de las excepciones contempladas en el decreto que reglamentó la cuarentena, afirma que muchos otros salen por motivos diferentes a trabajar, por lo que salen de sus casas sin una carta que autorice su libre tránsito.
De acuerdo con García, “más que una militarización, es la presencia del grupo de operaciones especiales de la Policía y de personal del Ejército en mayor número de lo habitual. Esos municipios están agrupando la mitad de los comparendos de todo el departamento por infracción, entiendo que hay gente que tiene que ir a Bogotá, pero no podemos permitir que pegados a ellos se vayan otros que no tienen nada que hacer en la calle. En esos municipios haremos un trabajo muy especial".
Ante los micrófonos de La FM, García agregó que “la inmensa mayoría está respetando el aislamiento preventivo, pero no queremos esperar a que eso siga así. Por eso le pido a la Policía y al Ejército que hagamos presencia mucho más fuerte en esos siete municipios, y esperamos que no sea por mucho tiempo”.
Respecto a los vendedores informales y otras poblaciones vulnerables que justifican sus salidas a las calles en que están buscando su sustento ya que viven al diario, García Bustos indicó que están trabajando con estas personas, a las que están inscribiendo en una base de datos para ayudarlos en los próximos días. La Gobernación de Cundinamarca calcula que puede llegar a entregar unos 130.000 mercados a familias que no han recibido ayudas.
Respecto a la capacidad hospitalaria de Cundinamarca, el gobernador indicó que se pasó de tener 177 a 500 camas de Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), cifra que la próxima semana aumentará a 634. Asimismo, el mandatario departamental recordó que hay dos clínicas alquiladas en Bogotá que son únicamente para atender a pacientes de Cundinamarca, donde se registran 23 casos de contagiados por Covid-19.