Damas distinguidas y recatadas

Por:

Liliana Reyes y Natalia Gedeón.

Aunque desde comienzos de siglo se realizaron los reinados estudiantiles en las principales ciudades del país, la primera beldad que apareció en portada de la revista Cromos fue la señorita Elvira Zea Hernández, reina de los estudiantes de Bogotá, en 1923, que sin ser la más bella inspiraba a los más reconocidos poetas. 

Una década más tarde, en abril de 1932, un comité nacional de belleza, conformado en su mayoría por periodistas y corresponsales de todo el país, escogió por primera vez en la historia a una Señorita Colombia. La ceremonia se realizó en el teatro Colón y la elegida fue Aura Gutiérrez Villa, del departamento de Antioquia. Cromos le dedicó dos portadas, antes y después de la elección que le permitió viajar a Bélgica al concurso de Miss Universo. En esa ocasión, Eduardo Castillo, el cronista estrella de la revista, entrevistó a cinco de las candidatas, a quienes coronó de elogios: “Bajo la masa espesa de los cabellos dorados, semejantes al casco de oro de una apsara guerrera o a la tiara rutilante de una emperatriz bizantina, resplandecen los ojos de un azul de flor acuátil, en contraste con el ostro de la boca, empurpurada como una herida recién abierta”, escribió sobre la candidata de Boyacá.

Dos años después, en 1934, empezó la historia oficial del Concurso Nacional de Belleza (CNB), cuando Ernesto Carlos Martelo y Daniel Lemaitre, con motivo de la inauguración del puerto de Cartagena, decidieron realizar un evento que promocionara dos joyas de Colombia: la ciudad amurallada y sus mujeres. 

En esos inicios, Cromos publicó fotografías de las candidatas que representaban el estándar de belleza del momento, con un toque de 'maja' española. Se trataba de jóvenes recatadas, que simbolizaban la mujer ideal por sus atributos de belleza y virtudes morales. Posaban con largos y elegantes vestidos que dejaban poca piel expuesta, y en las leyendas de las fotos se hacía mención a los 'súbditos' que caían rendidos a su paso. 

26 de mayo, 1934. La primera Señorita Colombia. Yolanda Emiliani Román, de Cartagena, fue elegida entre 10 candidatas en un certamen al que asistió el presidente Enrique Olaya Herrera. 

Un jurado conformado por intelectuales y figuras públicas, como Darío Echandía, Felipe Lleras Camargo y Germán Zea, eligió a la primera reina, Yolanda Emiliani Román, de Bolívar, quien terminó ostentando el título por trece años debido a los conflictos bélicos mundiales. 

El certamen reapareció en 1947 con mayor proyección y se vio desfilar a las reinas por La Heroica en traje de calle. Tan recatadas eran que la valluna Leonor Navia Orejuela, elegida Señorita Colombia en 1951 por el primer jurado internacional, no se dejó fotografiar en traje de baño. En la siguiente edición del certamen, el jefe supremo Gustavo Rojas Pinilla, coronó a Luz Marina Cruz Olave y abrió la velada bailando con la nueva soberana. Esa noche, Alfonso Bonilla Naar aclamó en verso a Stella Márquez Zawadzky, la reina tumaqueña. Y el periodista Félix Raffán Gómez le dedicó un poema a la nueva soberana, recogido en la revista: “Luz Marina... jamás poeta alguno, será capaz de insinuar con palabras, la insospechada música de tu mirada pura, de tu voz argentada, de tu cuerpo sinfónico, de tu sonrisa clara”.

23 de noviembre, 1959. La estampa de la reina.La tumaqueña Stella Márquez Zawadzky ocupó el sexto lugar en  Miss Universo, organizado en 
Miami en 1960. 

La ganadora en 1957 fue la antioqueña Doris Gil Santamaría, quien renunció a su título meses más tarde para casarse. La virreina Luz Marina Zuluaga, perfecta belleza latina, tomó su lugar y le trajo a Colombia la primera corona de Miss Universo. De las cuatro portadas que le dedicó la revista, en una salió con el presidente electo, Alberto Lleras Camargo. 

23 de noviembre, 1959. Luz Marina Zuluaga y César del Campo protagonizaron una foto idílica en el gran baile de presentación de las reinas que aspiraban a la corona en 1959.

A partir de 1958, con el teleconcurso Escoja usted a la Señorita Colombia, promovido por Cromos y dirigido por Gloria Valencia de Castaño, se afianzó la industria de la moda y la belleza en torno al reinado. Avianca las trasportaba desde las distintas regiones del país, y Cromos las recibía en el aeródromo de Techo y las atendía en la capital. Si bien las transmisiones radiales del concurso comenzaron en 1949, nada reemplazaba la imagen de las beldades. 
Desde mediados de los 50, con el despunte de la industria textil en Colombia, también se empezó a hablar de los modistos de las reinas. Y, con el tiempo, se fidelizaron marcas nacionales que quedaron en la recordación del concurso, como Jolie de Vogue, Lady Armonía, Arena, Mon Rêve, Ritchie, Jabón Dorado, Catalina y licores de distintas regiones, como lo demuestra un aviso publicitario de 2007: “Si su reina preferida va bien, póngale Ron Viejo de Caldas”.

Portadas del siglo

Octubre, 2004. Catherine Daza recreó la coronación de la primera Señorita Colombia, 70 años después.

14 de mayo, 1932. Aura Gutiérrez Villa, Señorita Antioquia, fue una de las siete candidatas que salieron en portada este año.