
El apio se caracteriza por su aroma, tener tallo esponjoso y una composición nutricional que incluyen vitaminas y minerales fundamentales para el cuerpo humano. Es rico en agua y considerado como un alimento regulador.
Estas son algunas de sus propiedades:
- Agua: su mayor contenido se encuentra en los tallos, aportando hidratación y ayudando a la diuresis. Es un excelente para la eliminación de cálculos renales.
- Fibra: estimula el correcto tránsito intestinal y regula las grasas.
- Fitoquímicos (flavonoides en mayor porcentaje): ayudan en diversas funciones biológicas como vasodilatadores, anti cancerígenos, antiinflamatorios, antibacterianos, estimulantes del sistema inmunológico, antivirales, entre otras.
- Contiene pequeñas cantidades de furanocumarinas activas biológicamente, que actúan en la prevención del cáncer. También se han utilizado en el tratamiento de algunas enfermedades de la piel como el vitíligo y la psoriasis.
- Posee vitamina C, E, potasio, sodio y calcio que regulan los sistemas: inmunológico, músculo esquelético, circulatorio, y la protección de la piel.
- El aceite de semilla de apio es rico en ftálidos, que tienen un efecto preventivo de los procesos cancerígenos. En especial, la sedanolida, que se usa para tratar procesos inflamatorios como la gota o el reumatismo.
Para disfrutar de todos sus beneficios, toma nota de las siguientes recetas.
1. Batido detox
Ayuda a depurar el organismo y disminuir la retención de líquidos, así como a la activación de sistema digestivo y la pérdida de peso.
Ingredientes:
- 2 tallos de apio con hojas
- ½ manzana verde
- Zumo de un limón
- ½ vaso de infusión de jengibre
Preparación:
Lava muy bien el apio y la manzana, lleva todos los ingredientes a la licuadora, mezcla y sirve sin colar. Toma todas las mañanas un vaso en ayunas y verás cómo disminuye la hinchazón y tu abdomen.
2. Ensalada con apio
Esta ensalada puedes incluirla tanto en el almuerzo como en la cena. Es ideal para saciar el hambre y disfrutar de todos sus nutrientes.
Ingredientes (1 porción):
- 2 tallos de apio
- 1 rodaja de piña
- 1 nabo
- ½ zanahoria
- ½ pechuga de pollo
Preparación:
Lava bien el apio, el nabo y la zanahoria, corta las primeras dos en rodajas y raya la zanahoria. Pica la piña en cuadritos. Luego corta la pechuga de pollo en cuadritos y cocínala en un sartén con un poco de aceite de oliva, agrega salsa de soya, una pizca de sal y pimienta. Cocina por 15 minutos y sírvela con los demás ingredientes.
3. Vaporización y mascarilla de apio para el cutis
Esta mascarilla descongestiona y purifica a piel. Es excelente para relajar y disminuir arrugas y manchas.
Ingredientes:
Mascarilla
- ½ tallo y unas tres hojas de apio
- 1 clara de huevo
Vaporización
- 1 tallo de apio con hojas
- ½ litro de agua
Preparación:
Lleva a una olla el apio y el agua a hervir cubriendo con una tapa. Cuando el agua esté en punto de ebullición, apaga. Previamente lava y tonifica la piel para que los poros estén limpios. Coloca una toalla en tu cabeza, destapa la olla y recibe el vapor, procurando tapar con la toalla para que no se escape. Recibe el vapor de 3 a 5 minutos. Seca la piel suavemente.
Esto ayudará a abrir los poros y dejar listo para la mascarilla.
Lleva a la licuadora el apio y la clara de huevo, licua y aplica la mezcla en todo tu rostro y dejando actuar por 20 minutos. Enjuaga con abundante agua, tonifica y pasa suavemente por tu cara, un par de hielos envueltos en una franela. Finaliza con crema hidratante.
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