Balanitis, una infección común en los niños
Es una condición muy frecuente a esta edad, pues los pequeños están en continuo movimiento y quieren que la labor de hacer pipí sea rápida. Esto provoca que no siempre se haga una higiene correcta en la zona, pues no hay el suficiente tiempo para retraer el prepucio y limpiarlo. Suele darse en niños que aún no lo tienen separado del glande (parte final del pene). Sus síntomas son: erupciones, mal olor, dolor al orinar y enrojecimiento del prepucio o del pene. Se denomina balanitis a la hinchazón del prepucio y del glande. En algunos casos, cuando hay infección puede presentarse con fiebre y escalofríos.
¿Qué la causa?
“En general ocurre porque se acumulan secreciones entre el pene y el prepucio (la piel que lo envuelve). Si estas secreciones son muchas, puede llegar a infectarse y hacer que el órgano se inflame”, explica el pediatra Ernesto Robles. A esta edad la mayoría de los pequeños, salvo por cuestiones culturales o religiosas, aún no han sido circuncidados, pero esta no es la causa de su presencia. La circuncisión es una alternativa que, según la Sociedad Colombiana de Urología, se recomienda practicar, solo a quienes la necesiten, por ejemplo, si la infección avanza y puede afectar la funcionalidad del órgano.
Medidas Efectivas
1. La principal manera de evitar que se produzca esta infección es lavar diariamente al niño, prestando especial cuidado y dedicación a esta zona.
2. El prepucio se debe asear cuidadosamente en cada rutina. Es importante mantener el pene del niño siempre limpio, cambiar frecuentemente el pañal y aplicar en la zona crema protectora que es un buen método de prevención.
3. Si el niño ya hace pipí en bacinilla o en inodoro, vigilar su aseo e irle enseñando poco a poco.
4. Si es recurrente, puede ser síntoma de una dolencia más severa. El especialista formulará antibióticos.
5. Los niños que padecen de diabetes son propensos a la repetición, y puede traerles graves consecuencias, como la formación de edemas.
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