
Consejos prácticos para tus pies
Los pies deben cuidarse de la misma manera como lo haces con tu cuerpo, manos y cara.
Comúnmente nos sucede que los llevamos cubiertos por mucho tiempo, ya sea porque vivimos en una ciudad fría o nos gusta llevar zapatos cerrados y olvidamos un poco el cuidado de esta zona. Solo cuando nos quitamos las medias y usamos sandalias o tacones descubiertos, es que nos damos cuenta de los problemitas que tenemos allí. Unos pies descuidados reflejan desaseo y pueden provocar problemas de salud muy graves que llevan hasta inhabilitarnos para caminar bien.
A continuación te daremos un par de consejos para mejorar uno de los problemas más comunes de los pies:
LA RESEQUEDAD Y LOS TALONES AGRIETADOS
Para mantener tus pies bellos, es fundamental un buen pedicure al menos una vez al mes. Es importante que cuides esta parte de tu cuerpo, es una de las más importantes y aunque no lo creas, muchas personas siempre están pendientes del aspecto que tienen.
Si sales de viaje, ten mucho cuidado con el uso de sandalias, el contacto con el aire y caminar descalza, pueden provocarte un aumento de resequedad en los pies, sin embargo, no es anormal que tus pies puedan padecer este síntoma durante todo el año, incluso tus talones puedes sufrir .
Para ello lo mejor es realizar un tratamiento que no sea agresivo y mejor si se hace progresivamente, expertos sugieren utilizar una lima específica para los talones como la piedra pómez, acompañados de productos exfoliantes que también ayuden a la eliminación de la piel muerta, pero que especialmente contengan derivados de la nuez, aceite de menta y eucalipto que relajan y suavizan e irán eliminando poco a poco esta piel muerta, al mismo tiempo que se irá regenerando.
Una vez hayas puesto al día tus talones o las diferentes partes con durezas en tus pies, el cuidado diario evitará la formación de nueva resequedad. Así mismo, nos recomiendan que una vez se pase suave y diariamente la piedra pómez sobre la piel húmeda, debes mantener tus pies humectados con una crema que contenga ácido glicólico o manteca de karite que mejorará la cicatrización al estimular la renovación celular.
Al igual que haces con tu cuerpo, el mantenimiento diario con una crema humectante ayudará a que tus pies se mantengan humectados durante el día, preferiblemente que contengan componentes necesarios para mantener la humectación de los pies como la manteca de karité, aceite de aguacate y de eucalipto.
Lo más importante de estos tratamientos es que debes insistir y no dejarlos, ya que algunas personas tienen más tendencia a formar callosidades que otras.