Rastreas información
Si hay alguien que sepa cosas que los demás usuarios no conocen eres tú. No estamos hablando de que violes la privacidad o cometas algún delito, pero si eres toda una “maestra” averiguando datos confidenciales de las personas que te interesan. Incluso, sabes la fecha y la hora exacta en que se unieron a la red social por primera vez.
Estás activa en todas las redes sociales
Esto es lo más importante de todo. Tienes todas tus cuentas actualizadas con las últimas tendencias, los nuevos íconos y los nuevos hashtags para estar dentro de la moda de la era tecnológica. Así que no hay actualización que se salga de tu alcance.
Sabes cómo funcionan las políticas de privacidad de todas las redes
Como eres toda una experta sabes perfectamente qué debes y qué no debes hacer para interactuar con los demás o analizar los perfiles de tus familiares o conocidos. Tus amigas siempre recurren a ti para averiguar cualquier dato que les pueda interesar para actuar de acuerdo a la situación que están viviendo. ¡Sensei!
Revisas las redes sociales de tu pareja o de la persona con la que está saliendo
Esta investigación puede tomarte horas, entras a todos los perfiles que tenga activos, revisas fotos, comentarios, likes, y miras minuciosamente las cuentas de las personas con las que más comunicación tiene. Tus alertas se encienden cuando empiezas a ver comentarios mutuos y tienes muy presentes las fechas para sacarlas a relucir en una futura pelea.
Utilizas las palabras técnicas para referirte a alguien
Tu vocabulario se ha ampliado que de eso no te quepa la menor duda. Frases como “Vi que publicó”, “Le dio me gusta a la foto de…”, “Posteo a las 4:00 un contenido sobre…”, son tan comunes en ti que te muestran como toda una experta en el tema tecnológico.
Revisas tus redes sociales con mucha frecuencia
No importa lo ocupada que estés, si estás en reunión o en el supermercado, siempre te tomas unos minutos para revisar tus perfiles en las diferentes redes sociales, y ver qué está pasando con tus contactos.
Foto: Istock