¡Guerra contra las arrugas prematuras!
1. Cuídese del sol: los rayos ultravioleta resultan muy agresivos para las zonas de la piel que más se exponen al sol. Este degrada las fibras de colágeno y elástina, el tejido que sostiene la piel, lo que ocasiona arrugas y flacidez. Por eso es necesario protegerse del sol desde la infancia pues la piel tiene memoria y las consecuencias del sol en la piel se observan años después.
2. La piel y el tabaco, enemigos acérrimos: el tabaco tiene efectos deshidratantes, disminuye la oxigenación celular y altera el colágeno. Estos efectos nocivos del tabaco también le ocurren a los fumadores pasivos.
3. Dormir mal envejece: el cuerpo necesita descanso, pues de lo contrario el envejecimiento se acelera y esto no sólo se percibe al día siguiente sino con el paso de los años.
4. Cuidado con el estrés: cuando una persona se estresa produce rasgos faciales que dejan marcas poco agradables. Es necesario saber que el estrés se puede contrarrestar pues se ocasiona por nuestras respuestas a situaciones complejas. Por eso cuando un individuo se siente agotado o estresado lo mejor es tomar una pausa y respirar.
5. Las cremas hidratantes: las mejores aliadas. Una buena loción hidratante resulta vital para la lucha contra las arrugas pues impide que el agua del cuerpo se escape. Estas protegen la piel y la aísla de los ambientes agresivos.
Foto: Archivo CROMOS.