
Guía de entrenamiento para dormir plácidamente
Las personas al entrenar se proponen distintos objetivos: perder peso, quemar grasa, mejorar el estado físico, tonificar, aumentar masa muscular o marcarse. Dormir y descansar son ingredientes claves para cumplir con la meta propuesta.
Y la receta clave que se debe seguir para obtener resultados, no importa el objetivo que se trace, consiste en realizar la actividad física indicada, tener una alimentaciaón que la complemente, y claro, disfrutar de un buen descanso.
El sueño tiene una actividad reparadora. Dormir nos ayuda a sintetizar proteínas, las moléculas que, en palabras simples, funcionan como alimento del músculo. Mientras dormimos los músculos que trabajamos en el gimnasio se construyen debido al efecto del sueño en la síntesis proteica. Asimismo, este nos ayuda a recuperar la energía gastada en el día y en la actividad física.
El ejercicio afecta positivamente la calidad del sueño. Los estudios han demostrado que la actividad física de manera regular en la mañana aumenta el sueño profundo. Es por esto que los especialistas recomiendan evitar el deporte y las actividades físicas en la noche, pues al hacerlo, se activa el sistema de vigilia. De igual manera, después de una mala noche no es recomendable ejercitarse, pues el cuerpo no se ha recuperado, los músculos están cansados y no se va a disponer con la energía necesaria para rendir físicamente.
Sí y no...
- Tomar un refrigerio ligero basado en proteína magra (carne, pollo y pescado) y vegetales.
- No se deben tomar bebidas oscuras, estimulantes ni alcohol.
- No comer de forma abundante.
- No use antes dispositivos como el computador, celular y tabletas.
- La ropa para dormir debe ser cómoda, holgada y de un material fresco.
- La habitación debe ser oscura en la noche, iluminada en el día con luz natural y contar con una buena circulación del aire. En lo posible se debe tener solo la cama y no tener cerca aparatos electrónicos como televisión, tabletas ni computadores.
- El tiempo adecuado para que el sueño se considere reparador es de 6 a 8 horas, de acuerdo al reloj biológico. Es muy importante que estas horas se traduzcan en un sueño de calidad.
¿Y el insomnio?
- Espere a tener sueño para ir a la cama.
- No haga siestas en el día.
- Si no puede conciliar el sueño o ya es tarde, levántese de la cama y haga alguna actividad monótona, contar ovejas no sirve. Vuelva a la cama solo cuando tenga sueño. Lea, por ejemplo, el manual de la impresora en un idioma que desconozca.
- Los trastornos del sueño pueden contribuir a accidentes cerebrovasculares, problemas del corazón, presión alta, diabetes y depresión, entre otros.
Agradecimientos a:
Karen Herrera, fisioterapeuta, subdirectora técnica y administrativa Unidad de Sueño CAYRE.
Dirección: Carrera 2 No. 98–38.
Tel: 6446800 - www.cayre.co
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