Por: Gilberto Eduardo Gutiérrez
En los primeros años de Cromos, las notas sobre el espectáculo hablan de las compañías de ópera —como la de Adolfo Bracale—, opereta y zarzuela de gira por Colombia. Conchita Perdomo, actriz de la compañía de Américo Mancini, constituía el deleite del público capitalino que asistía al Teatro Colón.
Otros eventos convocan a un público más diverso, como el estreno de la película María.
A manera de publirreportaje se celebra esta adaptación de la novela de Jorge Isaacs y se anuncia la próxima exhibición de la producción nacional. También se hacían invitaciones a encuentros de boxeo, como al de un chileno con un francés que pasaban por la fría capital y que se llevaría a cabo en el circo de San Diego o en el moderno y polifuncional Salón Olympia.
23 de febrero de 1918
Independencia dominical
Esta sección registra la diversidad social y el modo en que todos los estratos se juntan en el Parque de la Independencia para gozar el día del Señor.
También hace su aparición en Cromos el habitante común, que disfruta del paseo en el Parque de la Independencia en su día de descanso o asiste a la multitudinaria procesión dominical en las parroquias de Las Cruces o San Francisco. Con los años se irá transformando el tiempo libre y la revista hará de este uno de sus asuntos preferidos, no solo porque publicará innumerables crónicas sobre la manera en que la gente se distrae en los espacios urbanos, sino porque ella misma ofrecerá diversión a sus lectores: desde tiras cómicas (que aparecieron en los 40 con Mandrake el mago y Pepita y Lorenzo) hasta pasatiempos diversos, como crucigramas, sopas de letras y jeroglíficos.
16 de diciembre, 1916
Badignana en el salón Olympia
Seguramente el público capitalino acudiría masivamente al inmenso salón para ver el espectáculo importado.
23 de febrero, 1918
Teatro de Bogotá
El Parque de la Independencia era uno de los lugares más visitados los domingos, este teatro –recién inaugurado–hacía parte de sus atractivos.
Estas páginas no dejarán de lado la idea del futuro a través del horóscopo y el zodiaco, así como la programación de televisión y los anuncios de radio. Más tarde, las caricaturas desplazarán las historietas, y los juegos, los concursos y las rifas promovidas por Cromos pasarán a un segundo plano hasta desaparecer. Quedan vestigios como el horóscopo, que marcan el destino del distraído lector, y columnistas inolvidables, como la mentalista Regina 11, a quien después de hacerle una entrevista contrataron en 1974, ¡gracias a sus poderes!
Fotos: Archivo Cromos