La ginebra, una bebida clásica para disfrutar en Navidad

Una de las costumbres urbanas contemporáneas más importantes es, cómo no, la visita a bares exclusivos. Allí se dan cita amigos de siempre, parejas y ejecutivos cuando cae la tarde y es un buen momento para relajarse con un trago. El barman lo tienen claro: la ginebra es un trago infaltable en su oferta de bebidas por su refinamiento y aroma.

Este destilado, que se obtiene de la cebada y un proceso de aromatización con hierbas como el enebro, el cilantro y otras especies botánicas, es uno de los licores más emblemáticos de Europa (siglo XVII) y su tradición sigue pasando de generación en generación para reafirmarse como una bebida de culto. Hay dos clases diferenciadas de ginebras: La holandesa y la inglesa.

La segunda es la más popular y preferida por su suavidad. Amargas y secas, se conocen como las London Dry Gin, todas con sabores y acentos diferentes dependiendo de los procesos que cada marca le imprime a este aguardiente británico.

Tanqueray No. 10, Bombay Sapphire, Bulldog, No. 209, Whitley Neill, Hendricks, London No. 1, Brockmans, Citadelle, Beefeater son algunas de las marcas más reputadas para preparar un buen Gin & Tonic, el coctel estrella que se prepara con aguas tónicas, y que fue el favorito de personajes como Ernest Hemingway y Francis Scott Fitzgerald. Winston Churchill, el político británico, dijo que el Gin & Tonic había salvado más vidas que todos los doctores del país.  

La ginebra no se bebe pura. Es la base de cocteles clásicos como el Dry Martini y el Gin & Tonic.

Es digestiva debido a su receta a base de ingredientes botánicos.

Menos es más. Para disfrutar un  Gin & Tonic no hace falta excederse. Con un solo coctel es suficiente para vivir una experiencia estimulante. 

Algunos le agregan cáscaras de cítricos, pepino y otros aromatizantes como pimienta y aceitunas.

Es una bebida sofisticada y a la vez versátil. Es trendy y se asocia a consumidores de paladar exigente.

Antiguamente se usó como medicamento para curar la malaria.

Los puristas recomiendan preparar esta bebida con rituales que incluyen la oxigenación del destilado, el ritmo de servido, la copa de balón.

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