
Por:
Eduardo Gutiérrez y María Isabel Zapata.
No faltaron las fotos de los grandes hombres de empresa junto a los políticos más prestantes de la época, como pudimos ver en el festejo del enlace entre los hijos de Pepe Sierra y Rafael Reyes. Las mujeres figuraban por ser hijas, madres o esposas de algún personaje, como es el caso de Emilia Cuervo, presentada en la sociedad londinense por ser la hija del ministro de Relaciones Exteriores. En esas primeras décadas de la revista, las damas se desempeñaron como institutrices o maestras y su participación más renombrada fue en los reinados de la Flor del Trabajo, que comenzaron en 1919, donde cumplían el papel de madrinas de los trabajadores.
12 de marzo, 1932.
Tela de dónde cortar
Damas de la alta sociedad de Tunja vestidas con telas Samacá durante la Semana Industrial realizada en esa capital.
La primera multitud que irrumpe en la revista —caracterizada por los sombreros de bombín— es la que se aglomera en la plaza de Bolívar para recibir al presidente que acabó con la hegemonía conservadora, Enrique Olaya Herrera. Durante las siguientes dos décadas, las multitudes acompañarán a la república liberal, ya sea en las ferias del libro, en los mítines, en los lugares exóticos o en las calles que presumían de avenidas en las distintas capitales. La actualidad, ilustrada en extensos despliegues fotográficos mostraba a la gente desfilando por la guerra contra el Perú, en las campañas electorales o en las celebraciones sacras, así como trágicamente lo haría en junio de 1929 contra la ‘rosca bogotana’, protesta que terminaría con el sacrificio del estudiante Gonzalo Bravo Páez. Devastador acontecimiento que todavía se conmemora en las universidades públicas del país.
En 1925. Emilia Cuervo fue presentada en sociedad en Londres como hija del ministro de relaciones exteriores.
19 de febrero, 1938.
Enrique Olaya Herrera. Presidente de Colombia en el periodo 1930-1934, uno de los estadistas más distinguidos de la generación del Centenario.
Olaya será el paradigma para la revista de espíritu liberal, que le dedicó una quincena de portadas. Él, como embajador de Estados Unidos, estrechó las relaciones diplomáticas que tanto le servirían durante su presidencia para lidiar con la invasión peruana en Leticia. Su sepelio, en 1937, habló de un hombre que viajó en trasatlántico, en tren, en carro y en chiva, montaña abajo y río arriba, desde el Palacio de San Carlos hasta las entrañas de la nación. Y le quedó tiempo para salir de pícnic a Fusagasugá con su esposa y amigos.
20 de diciembre, 1961.
John F. Kennedy con Alberto Lleras
El expresidente de los Estados Unidos un en medio de su gira por Latinoamérica, en la que consolidó sus relaciones con este lado del continente.
12 de abril, 1954.
Inauguración del Salón de belleza Marlene
Uno de los más dotados, que no tienen nada que envidiar a los de las grandes capitales del mundo. Situado en la carrera 8ª #20-17.
Foto: Molano.
A medida que avanzaban los años 40, las mujeres iban desapareciendo de las portadas y se refugiaban en las secciones de vida social. Mientras tanto, las pantallas de Hollywood iban dando lugar a primeros planos de las divas rubias, quienes eran captadas en poses infantiles o seductoras. Las señoritas criollas fueron mutando hacia amas de casa con la parafernalia de los electrodomésticos que la publicidad comenzó a vender. No
rubias, pero sí estilizadas y modernas.
14 de septiembre, 1918.
Procesión en Las Cruces.
La procesión de la Virgen del Carmen se realizó en el tradicional barrio Las Cruces en medio de una multitud de devotos.
5 de octubre, 1918.
Enlace de fortunas
Matrimonio de Clara Sierra, la hija del millonario antioqueño, Pepe Sierra, con Enrique Reyes Angulo,
el hijo del expresidente.






