¿Los hijos o el trabajo?
Esta vallecaucana llegó a Bogotá porque el destino la trajo. Trabajaba en Telepacífico y aunque se había presentado para dos castings en la capital colombiana, no fue elegida en ninguno de los dos. Una entrevista a Mauricio Gómez para su programa de opinión y debate en el canal regional fue la que finalmente la trajo a la capital. Recibió la oferta y comenzó en 2007 presentando el noticiero de los fines de semana.
Estuvo alejada de la pantalla desde hace cinco meses cuando nació su hijo Luciano, pero ya regresó a su trabajo, no sin antes enfrentarse al gran dilema de todas las mamás: ¿Me quedo con mi hijo o regreso al trabajo?
“Yo decía, ‘no quiero tener hijos por responsabilidad con el universo, hay muchos niños y si alguna vez me llama el instinto maternal adopto’. También dije que a mis hijos no los iba a criar la nana. Ahora a mi hijo, Luciano, lo cría la nana y yo lo cuido a ratos porque, aunque tengo un horario flexible, como al resto de las mamás colombianas me tocó dejarlo en la casa para trabajar”.
Mábel Lara dice que su pensamiento cambió desde que es mamá. “A qué hora nos metimos las mujeres en esas arandelas: ser buenas profesionales, buenas hijas, buenas esposas, buenas amantes y, además, tener que vernos divinas… ¿Por qué no nos quedamos en la casa al menos por un tiempo?”
Y aunque confiesa que cuando tomó la decisión de ser mamá contempló, junto a su esposo, la posibilidad de dejar de trabajar, pensó: “mamá feliz, bebé feliz” y así volvió al noticiero.
“Cuando supe que la licencia de maternidad es de solo tres meses me dio duro porque dejar a un niño tan ‘pollito’ en manos de la cuidadora es difícil para mujeres que queremos seguir con nuestra carrera y no podemos quedarnos en casa. Para mí fue muy duro, lloré mucho”.
“Decidí dejar Blu Radio porque a la hora que tenía que estar en la emisora, Luciano despierta y me regala una sonrisa enorme… Creo que tomé la decisión correcta. Antes decía ¿ser mamá?, ahora pienso, ¿uno, y por qué no dos?”
Para enfrentar el dilema
(Con asesoría de Tanith Puentes - psicóloga clínica)
-Si usted está entre los 28 y 35 años la presión social para que sea mamá es muy fuerte. Tome la decisión consciente del rol que va a asumir
-Opte por lo que la haga feliz, así quienes lo rodean también lo serán
-Cuando tenga su hijo y venga la ambivalencia, sea generosa con usted: establezca una prioridad
-Organice muy bien su tiempo para ser una excelente profesional y mamá