Maluma, un reguetonero con cara de niño

Con su sonrisa de niño inocente enamoró al país. Pero no solo les robó suspiros a las jovencitas. Este carismático paisa logró encantar a mujeres de todas las edades. Aunque ya era conocido entre los más jóvenes por canciones como La temperatura, su cara irrumpió en los hogares colombianos en horario triple A a través del programa concurso más exitoso de los últimos años: La Voz Kids, del Canal Caracol. Su ingreso como entrenador, al lado Fanny Lu y Andrés Cepeda, generó escepticismo porque no era la figura más reconocida de la música urbana y porque a su corta edad, veinte años, se batía con dos grandes de la música. Aun así, este futbolista frustrado se robó los corazones de la audiencia y se llevó el premio mayor del reality con su pupila, la bumanguesa Ivanna García. «El programa cambió más mi vida personal que la profesional; hizo que me reconocieran en cada rincón del país. Eso que a muchos artistas les cuesta años, yo lo logré en tres meses», reconoce.

Por si fuera poco, este reguetonero estuvo nominado al Grammy Latino como Mejor nuevo artista, y arrasó en los Premios Shock, donde fue elegido por el público como Artista de la gente, Mejor artista o agrupación de Colombia. Su canción Addicted, por su parte, recibió el premio a Mejor canción radio.

Para cerrar el año grabó, en vivo durante un concierto en Santa Marta, una versión remezclada de Ella es mi fiesta, con Carlos Vives, que se convirtió en una de las canciones más escuchadas de la temporada de Navidad. 

Este 2014 le trajo fama y éxitos, pero no tuvo hogar estable, porque no paró de viajar ni de dar conciertos. Por eso en el fondo sigue siendo el mismo jovencito que sueña con estar al lado de su mamá y de su familia. «Es mi lugar de tranquilidad en estos momentos de mi vida», dice. Un año mágico e inolvidable.

Foto: Paola España Press & Entertainment