Quiero que mi hijo sea un hombre de verdad

Por: Lina Henao  

Blog: MamásDiva

Tengo varias amigas que hablan con frecuencia sobre la igualdad de género y, cada vez que retoman el asunto, caigo en cuenta de que cada vez soy más sensible al machismo y menos tolerante a esos comportamientos que veo a mi alrededor. Estas ideas se fortalecen cuando pienso en que tengo un hijo que me invita a cuestionarme sobre mi responsabilidad en la conformación de su mirada en torno a este tema, en torno al respeto hacia las mujeres. 

En medio de esta reflexión, comencé a notar que, por haberme criado en un mundo lleno de niñas, nunca había sido consciente de los efectos negativos del machismo en los hombres. Mi esposo me hizo caer en cuenta de eso. Me contó que en los colegios de hombres siempre se ponen apodos, se retan a hacer idioteces para probar su hombría y constantemente compiten unos con otros. Pienso en todo eso y de inmediato me vienen a la cabeza todas las imágenes que hemos visto este año de agresiones contra las mujeres. Rotan en redes sociales y me producen entre ira y profundo desconsuelo. 

Por momentos siento que es una problemática que no tiene salida. Mi esposo me dice que las cosas son así. Pero después recapacito. Me niego a aceptar  que ese es el único camino. Yo no voy a criar a mi hijo para que sea como todos los demás. Y me niego a creer que yo sea la única mamá que se hace estas preguntas. Estoy segura de que Sebas encontrará un ambiente diferente al que le tocó a mi esposo en su época colegial.

Ese prototipo de ‘macho’ está mandado a recoger. Ante nosotros empieza a surgir una nueva definición de lo que es un ‘hombre de verdad’, y la debemos construir entre todos. Tenemos que ayudar a los hombres para que puedan escapar de esa presión que los obliga a ser de determinada manera, para que puedan ser ellos mismos, para que se sientan libres y, en esa medida, se comporten con las mujeres como ellas se lo merecen.

Como madre de un hombre me comprometo a enseñarle que hay muchos más colores que el azul. Que está bien tener miedo y expresar sus sentimientos. Que la competencia no le dará tranquilidad a su espíritu y hacer sentir menos a los otros le producirá zozobra. Que tiene que aprender a cuidarse y respetarse para poder replicar eso en los demás. Le enseñaré que no necesita máscaras ni poderes mágicos para ser un hombre de verdad, por que él ya lo es. 

Foto: Istock