Aunque no lo creas es cierto. Lo primero que debes saber es que gemido no es igual a sonido, los gemidos son producidos por la excitación que produce el acto sexual, mientras que los ruidos son propios de la emoción, de la percepción y de la intensidad que se vive en el momento con la pareja. Gritar, quedarse en silencio, exagerar y susurrar son las herramientas para identificas que tipo de mujer eres en la cama.
Por eso hoy traemos para ti una pequeña clasificación que se puede ajustar a tu forma de ser:
Gritos
Si gritas durante el sexo eres una mujer que le gusta enfrentar la vida, eres impulsiva, asumes los riesgos, no tienes miedo de ejecutar lo que visualizas para tu vida. Los experimentos en todos los escenarios donde te desenvuelves son la medida perfecta para entender tus pasiones y tus ambiciones, así que gritarle al mundo lo excitada que te sientes con todo, es la mejor respuesta a lo hermoso que te pasa en el camino.
Susurros
Eres una mujer romántica, idealizas el amor, y tus sentimientos van de la mano con las sensaciones que explora tu cuerpo cuando llegas al orgasmo. Sin embargo, eres temerosa, probar cosas nuevas no te parece divertido, y salirte de tu zona de confort no está en tus planes, por lo que en momentos pueden tildarte de aburrida y mojigata.
Exageración
Si eres de las que está todo el tiempo buscando protagonizar una película erótica, seguramente te sentirás identificada con expresiones como “¡No vayas a parar!”, “¡Más duro!”, o “¡Dame más!”, pero ¡detente! No te sobreactúes, ese tipo de exclamaciones hacen que los hombres te vean como una mujer insegura, que quiere robarse todo el protagonismo del momento.
Silencio
Eres una mujer muy clásica y tradicional. Aunque las personas con las que has tenido encuentros íntimos pueden pensar que eres “frígida”, o que no sientes nada, pueden llevarse una gran sorpresa.
La mayoría de las veces estás analizando todo lo que ocurre alrededor del encuentro, así que todos tus movimientos son calculados, te niegas a explorar nuevas posiciones, o sensaciones, no te gusta que te presionen y como si fuera poco tus orgasmos van en sincronía con lo que piensas.
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