Por: Carlos Torres y Gabriela Castro.
El terreno
Antes de llegar al lugar, investigue. Busque qué especies de animales se encuentran en esa zona para que sepa a qué atenerse. Trate de que sea un espacio cerca del agua; un río, un lago o un arroyo facilitarán el aseo personal y la preparación de los alimentos. Si acampa en temporada de lluvia, haga unas zanjas alrededor de la carpa para que no se inunde. Si su plan es en la playa, ubíquese lo más cerca del mar que pueda, para recibir la frescura de la brisa. En los parques naturales hay una serie de reglas que debe respetar, cerciórese de cumplirlas al pie de la letra para que su experiencia sea amigable para usted y para el ambiente.
La ducha
En el mercado se encuentran unas bolsas con capacidad para cinco galones de agua, de las que pende una manguera. La luz del sol sobre el polietileno negro ayuda a calentarlas. Son fáciles de colgar y se almacenan en el equipaje como si fueran camisetas. Solo es cuestión de doblarlas y volverlas a llenar cuando llegue a su destino.
La alimentación
Normalmente en las zonas de camping no hay tiendas; si existe alguna, está usted con suerte. Por eso es mejor que empaque toda clase de enlatados, pan, mortadela, queso, paquetes para picar y fruta fácil de comer. Calcule la cantidad, según los días que va a acampar. El agua siempre es fundamental, lleve bastante, especialmente si habrá calor. Sí se le acaba, puede recogerla en el río, siempre y cuando no haya espuma alrededor. Llevar panela en polvo le ayudará a no perder electrolitos en clima cálido.
La carpa
Comprar una es comparable a invertir en un electrodoméstico. A corto plazo es posible que le duela en el bolsillo, pero más adelante sacará pecho. Por eso no hay que escatimar recursos. Las marcas reconocidas brindan seguridad. Son las mismas que conservan la temperatura, resisten la lluvia y el viento, y se pueden llevar en la maleta. Hay para dos personas o más. La carpa será su casa por unos días, con paredes, piso y techo adecuados. Debe ser firme al sol, a la noche, en el frío y en el calor.
El sueño
Es posible acampar liviano y cómodo. El sleeping es un recurso que siempre que esté puesto sobre una superficie uniforme, sin baches ni montículos, le ayudará a recuperar energía durante la dormida. La bolsa en la que viene guardado puede servir de almohada, si la llena de ropa. Por supuesto que es mejor dormir sobre un colchón inflable, pero la idea de esta nota es acampar con lo básico, de tal modo que pueda demostrar que es posible ser práctico cuando uno se lo propone.
La ropa
La ropa cómoda siempre será su mejor amiga en cualquier clima. Lleve entre tres y cinco mudas: camisas manga larga y pantalones, no pantalonetas, por el tema de los mosquitos; evite los jeans, las camisas pegadas y los zapatos pesados. Una gorra le será de mucha ayuda y si decidió acampar en clima frío, guantes, chaqueta impermeable, prendas sintéticas o térmicas, y varios pares de medias serán fundamentales para que el clima no le afecte.
La maleta
Así como un objeto de más puede hacer la diferencia en la aventura, para bien o para mal, el equipaje es fundamental. La mochila debe tener varios bolsillos, lo suficientemente reforzados para sostener sus cosas. Que tenga cierres es importante, para asegurarlos con candado. En lo posible, la tela debe ser impermeable. En caso de ser fabricada en otra tela, puede adquirir una funda impermeable que la cubra de arriba a abajo. Si es posible, lleve un 'canguro' a la cintura, para tener a la mano la billetera, una linterna y el celular.
La higiene
Una de las cosas a las cuales uno debe mentalizarse es que en los lugares de camping no hay una zona de duchas o baños. Por esa razón, los implementos de aseo son pocos: papel higiénico, pañitos húmedos, crema de dientes, cepillo de dientes, desodorante, desinfectante, repelente, bloqueador solar y toallas, en caso que vaya a la playa. No se preocupe por lo demás, eso hace parte de la aventura.
Para tener en cuenta
- Lleve dinero en efectivo y más de lo necesario para cualquier eventualidad que se presente.
- La linterna será su guía en la oscuridad, no la deje nunca.
- La vacuna contra la fiebre amarilla debe ser aplicada ocho días antes de viajar a una zona cálida.
- No olvide las bolsas plásticas.
- Siempre que esté fuera de la carpa, ciérrela y evite así animales dentro de ella.