
La edición 58 de El Festival Internacional de Cartagena de Indias inició con el estreno nacional de la segunda película de Daniela Abad Lombana, The smilng Lombana.
Este, al igual que Carta a una sombra que se estrenó en este mismo Festival en el año 2015, escarba la historia familiar de la directora investigando, a través de su abuela, tía y personas cercanas, la historia de su abuelo materno Tito Lombana. Un artista colombiano lleno de gran sensibilidad por el arte y la decoración que logró llegar a Italia para reforzar su personalidad y su trabajo, y aun así, terminó siendo desconocido para muchos.
Pero, ¿qué tiene de curioso este documental? Primero que a Abad se le ocurrió mucho antes de Carta a una sombra escribir sobre él, sobre su abuelo materno porque era un personaje lleno de matices y contradicciones, y ella quería descubrirlo.
Todo comenzó porque ella lo conoció poco antes de su muerte. “Él me regaló un sobre con dólares, lo que fue raro, pues yo tenía doce años, pero aun así me sentía la más millonaria. Ya con el tiempo, empecé a preguntarme por qué fue todo tan raro, por qué querían ocultarlo de nosotros, por qué se había roto el lazo familiar de manera tan profunda. Me preguntaba por qué nos habían escondido a Tito.”, comenta Daniela.
Esa curiosidad por un familiar tan ajeno se despertó en ella, agregando además porque nadie conoce (pues aun no le acreditan) sobre la vida y la obra del artista que esculpió el monumento más emblemático de Cartagena, los zapatos viejos. Encontrar la respuesta a esto fue la tarea en la que se sumergió para explorar la vida de su abuelo sin ahorrarse preguntas incómodas al pasado.
Dentro de la investigación Abad descubre que en el regreso de Italia a Colombia su abuelo, con una italiana liberal como novia y luego esposa, terminó atrapado en la tragedia colectiva de un país que decidió entregarse a la vorágine del éxito y el dinero rápido, sin medir los daños inmediatos y futuros de esta decisión. Eso termina explicando por qué su mamá y su abuela se molestaron tanto cuando ella les preguntó sobre él.
La narcocultura se entrelazó con la vida de Tito Lombana y ellas evitando relacionarse con esto, pero al mismo tiempo evitando que lo juzgaran por lo que hizo, se negaron a participar. Aunque con el paso del tiempo Abad consiguió hacer solo registro de la voz de su abuela, que es la que narra muchos momentos del documental. Paralelamente, el documental también revela la manera en la que Tito Lombana asume el costo de sus actos, y que con ellos cambia el destino de sus familiares.
Una historia para seguir conociendo a uno de esos artistas incógnitos que ha tenido nuestro país. Daniela Abad logra con su segunda película sembrar ideas y preguntas que incumben a todos los colombianos. Ser valiente y atreverse a hablar.
Foto: David Schwarz.
