Foto: David Schwarz.
P: Alguien que lo haya marcado.
R: Mi mamá, por su capacidad de amar y de trabajar, pero sobre todo por demostrarle a mi papá y al mundo que ella sola podía sacar a su familia adelante.
P: Describa una imagen de su niñez en Medellín.
R: Las tardes de los viernes con mis hermanos, mi abuela, mis tías y primos, invadiendo el costurero de mi mamá.
P:¿En quién piensa todos los días?
R: En Dios, en mi familia, en Carlos Andrés.
P: ¿Cuándo fue la última vez que lloró?
R: Oyendo música con Carlos Andrés, no hace mucho tiempo.
P: Un color para el 2019.
R: El de los flamingos. Y el blanco, para siempre.
P: Un ícono de la moda colombiana.
R: Toby Setton.
P: Para usted qué elemento es esencial para no ser una ‘fashion victim’.
R: Tener claro que todo lo que está de moda no nos queda.
P: ¿Qué es lo que menos le gusta del mundo de la moda?
R: Tanto “experto” salido de debajo de las piedras.
P: ¿Y lo que más le gusta?
R: Que la historia del mundo se puede contar a través de ella.
P: ¿Chaqueta de jean o de cuero?
R: De jean.
P: ¿Tenis o zapatos de material?
R: Tenis, zapatos, botas, slipers, sandalias... casi todos.
P: Una prenda para rescatar del armario del abuelo.
R: La ruana que usaba en la finca. Y su carriel.
P: Y una para echar a la hoguera.
R: Los crocs.
P: ¿Qué recuperaría de su juventud?
R: La vida, sin prevenciones.
P: ¿Qué no tolera?
R: La ordinariez.
P: ¿Qué debería dejar de estar de moda para siempre?
R: Los jeans sin bolsillos traseros, el teni-tacón, los crocs, las camisillas...