Catalina Acosta es reconocida por haber sido coronada como Señorita Colombia en 1999, al representar el departamento de Cundinamarca, ganándole la corona a la representante de Valle del Cauca, Carolina Cruz, actual presentadora de ‘Día a Día’.
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Sigue a Cromos en WhatsAppSu reinado fue bastante mediático, especialmente luego de que apareciera en la telenovela más icónica del país, ‘Yo soy Betty, la fea’. Al siguiente año se presentó en Miss Universo, donde quedó seleccionada entre las diez finalistas.
¿Qué le pasó a Catalina Acosta?
Siendo la última señorita Colombia del siglo XX, después del certamen y de haber pasado por todo el proceso de un reinado, decidió irse a Italia y aunque muchos pensaron que regresaría con ánimo de continuar en la industria del entretenimiento no fue así.
Su inquietud la llevó a la política, al punto de llegar a ser diputada de Cundinamarca, consiguiendo un lugar en la Asamblea de este departamento, luego de obtener 40.000 votos y recibir el apoyo del entonces gobernador, Pablo Ardila.
Además de haber estudiado derecho, y aplicarlo en su carrera política, a Catalina Acosta el gusto por la política le duró ocho años, sin descartar la oportunidad de regresar.
Su belleza, su inteligencia y talento la llevaron a otro país y hoy en día se dedica a otra cosa fuera de las pasarelas y de la política.
A pesar de que estaba haciendo campaña política en Colombia, no dudó en irse con su esposo Diego Arévalo, para apoyarlo en un gran trabajo que le ofrecieron en México, país en el que decidió radicarse y vivir con su familia.
“Justo se dio que en ese momento político, no se estaban dando las cosas y estaba el ambiente pesado y dije ‘listo agarramos maletas y nos vamos’”, señaló la exreina en conversación con ‘Buen día Colombia’.
Dijo también que cuando decidió irse “yo en ese momento estudiaba derecho y por el reinado lo pospuse. Fue un año difícil, de mucha controversia por mi virreina [Carolina Cruz], entonces fue duro y aún lo es, a veces digo ‘no puede ser que aún digan que yo me robé una corona’”.
Ahora, 25 años después, continúa viviendo en México, país en el que ya cumplió 9 años y en el que sigue criando a sus dos hijos. Alcanzó a hacerle campaña al expresidente Uribe y después de haber trabajado mucho, de un momento a otro le cancelaron contrato “Dios me trajo acá a México a hacer un proceso de detox”, señaló entre risas.