
Diana Bustamante, directora artística del FICCI 2017
En la programación del Festival Internacional de Cine de Cartagena, que se realizará entre el 1 y el 6 de marzo, las mujeres serán protagonistas. Diana Bustamante, su directora artística, recomienda algunas producciones dirigidas por ellas sobre la maternidad, la familia, el arraigo y el conflicto colombiano.
1. El sitio de los sitios
Director: Natalia Cabral y Oriol Estrada.
"Es la segunda ocasión en el Festival Internacional de Cine de Cartagena (FICCI) que proyectamos una obra de la pareja dominicana. Ambos tienen un tipo de documental calculado, con dominio absoluto de la imagen. Es tal su elaboración que parece una ficción. Uno siempre se está preguntando: '¿cómo lo grabaron? ¿Cómo lograron tanta naturalidad?'. Lo defino como un extenso trabajo de observación, no es un cine de lo inmediato, de salir a capturar, sino de tener un tema y explorarlo con maestría y paciencia. Los directores abordan la experiencia de vivir en República Dominicana, de ser dominicano, con el trasfondo de la inequidad social y la ineficiencia del estado, frente a un hermoso mar azul".
2. Bezbog
Director: Ralitza Petrova.
"Es parte de Gemas, una de las secciones más seguidas por el público en el festival. Se exhiben películas con un amplio recorrido internacional, más allá de los premios (en los que yo no creo). En este caso, estamos hablando de una primera película con una relevancia muy particular. El contexto es un país excomunista, sumergido en un problema de corrupción generalizado, tan grave, que empieza a permear el alma de los personajes. Este es el punto de partida de Bezbog, un filme preciso que, a pesar de ser duro, es una reflexión sobre la esperanza y la posibilidad de redención que tenemos los seres humanos hasta el último segundo de nuestra existencia. Su efecto, como una droga, te estalla horas después de verlo. El debut de Petrova, que tiene 41 años, se siente como un rugido en un mundo en el que se privilegia la belleza y la juventud, y ñen el que a los 40 años ya estás acabado o decadente. Su madurez vivencial es evidente en esta ópera prima".
3. Epifanía
Director: Anna Eborn y Óscar Ruiz Navia.
"Es una obra que genera interrogantes. Al principio uno se pregunta: '¿esto qué es?'. Luego descubres su poder de transformar la narrativa, porque pone en riesgo ideas preestablecidas del cine. A partir del juego de lo real y lo documental, Eborn y Ruiz Navia tejen una nueva narrativa en la que intervienen las memorias que tienen sobre sus propias madres. Es una codirección bellísima, una suerte de cadáver exquisito, en el que cada director dejó plasmado un pedazo de su alma".
4. El silencio de los fusiles
Director: Naralia Orozco.
"Es un ejercicio riguroso desde lo periodístico y lo cinematográfico, que da cuenta del último proceso de paz en Colombia. En momentos de polarización, el espectador encuentra paridad en esta pieza auténtica, hecha durante cuatro años con amor y compromiso. Por su calidad y pertinencia se ganó el derecho de abrir el festival. Sin caer en obviedades ni maniqueísmos, trata de manera inteligente los diálogos entre Gobierno y Farc. Hay ecuanimidad y correcta distancia".
5. Amazona
Director: Clare Weiskopf y Nicolas Van Hemelryck.
"Es una producción en la que se encuentran la directora y su madre, fruto de un proceso largo y sensible. Es una reflexión documental sobre la maternidad, en el que está manifiesta la primera persona de Clare, con el complemento maravilloso otorgado por Nicolas, el otro autor. Es fácil caer en la autocomplacencia cuando el director se atreve a hacer una película sobre sí mismo y las relaciones con sus padres, pero este retrato familiar, desarrollado en la jungla colombiana, no sufre de ello. Hay equilibrio en la diferencia de miradas, aunque se privilegia la voz de la hija".
6. Adiós entusiasmo
Director: Vladimir Durán.
"Sé que estamos hablando de directoras mujeres, pero me permito poner de relieve esta otra primera película. Estrenada en el Festival de Cine de Berlín, es una apuesta hacia el poder de los actores y al rol del director como gran titiritero. La intención de Vladimir está puesta en torno a las relaciones familiares, con un alto grado de drama psicológico. Es hermosa, sensible y única".
7. Love and Cake
Director. Catalina Ramírez Chávez.
"Pertenece a la sección de Nuevos Creadores, en la que participa cualquier colombiano que esté en proceso de formación como director. Love and Cake (Amor y ponqué) es una de las piezas que más llamó la atención, en la medida en que el espectador muta a explorador. Su estética está más en el gesto que en lo narrativo, en lo libre. Es una idea inclasificable, donde se perciben intuiciones muy fuertes en términos formales y estéticos de la directora".
Fotos: cortesía.






