1. Es rica en proteína. Por ser de origen animal, se logra un mejor aprovechamiento biológico.
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2. Aporta vitaminas del complejo B, necesarias en gran parte de los procesos que ocurren en el cuerpo.
3. Aporta un mineral indispensable en el crecimiento y desarrollo llamado Zinc, que además posee características antioxidantes.
4. Contiene otros minerales como el hierro. La falta de este mineral produce anemia ferropénica.
5. Es un alimento que tiene una textura suave, por lo tanto facilita la masticación y deglución.
6. Tiene una variedad de cortes que facilita realizar múltiples preparaciones para los niños.
7. Es una proteína que permite una fácil digestión, por lo que es asimilada muy bien por los niños.
8. Se puede ofrecer en todos los tiempos de comida, incluso en las meriendas de los niños.
9. Se puede ofrecer acompañada de frutas, verduras, tubérculos, cereales; con cualquier otro alimento combina muy bien.
10. No se debe sobrecocinar, ya que se pierde el importante valor nutricional que contiene.
Foto: iStock.